Cada hora que pasa el cerco a la ciudad de Gaza se estrecha más. La ofensiva terrestre de Israel avanza y los enfrentamientos entre soldados y miembros de la organización islamista Hamás se producen calle a calle. Este martes el Ejército israelí ha informado de la captura de múltiples edificios militares y gubernamentales; incluyendo "la sede de la asamblea legislativa y del Gobierno de Hamás", desde donde los propios soldados han compartido fotografías posando con banderas israelíes. Los vídeos difundidos por las tropas muestran un ciudad destruida por los bombardeos donde la mayoría de servicios están bajo mínimos. La ONU ha advertido este martes de la crítica situación humanitaria: ya solo queda un hospital en funcionamiento en todo el norte de la Franja.
"Las fuerzas de combate combinadas de la Séptima Brigada controlaron la sede de la asamblea legislativa y del Gobierno de Hamás, el cuartel general de la Policía y una facultad de ingeniería utilizada para la producción y el desarrollo de armas", ha confirmado la portavocía militar. El Ejército comparte desde hace días imágenes donde supuestamente demuestran como los edificios tomados han sido utilizados como centros de entrenamiento, control y detenciones e interrogatorios. Además, también han confirmado que el campo de refugiados de Shati está bajo "control operativo" de Israel, donde habrían logrado ubicar 160 túneles y unas 2.800 infraestructuras.
Otra brigada israelí ha tomado este martes la residencia del gobernador, que habría sido identificada "como una instalación utilizada por la organización terrorista Hamás". El edificio albergaba tanto las oficinas militares y policiales de Hamás como las oficinas de inteligencia militar, el cuartel general y varios puestos de avanzada de la organización, según Tel Aviv. El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, ha dicho que Hamás "ya no controla la ciudad de Gaza". "No existen ninguna fuerza de Hamás capaz de detener a las Fuerzas de Defensa de Israel. Las FDI están avanzando en todos los frentes", ha dicho.
Israel denuncia que los centros hospitalarios están siendo utilizados para albergar "terroristas de Hamás", lo que justificaría, según argumentan, que sean atacados. El portavoz del Ejército de Israel, Daniel Hagari, ha asegurado desde el mismo hospital de Rantisi haber encontrado "evidencias de que los terroristas regresaron de la masacre del 7 de octubre a este hospital". "En el sótano, encontramos un centro de comando de Hamás, con chalecos bomba (para ataques) suicidas, granadas, rifles de asalto AK-47, artefactos explosivos, lanzacohetes antitanques y otras armas, computadoras y dinero. También encontramos señales que indican que Hamás mantuvo a rehenes en ese lugar", añadió.
Por el momento Hamás niega el uso de estas instalaciones y desde organismos internacionales piden que los hospitales no sean bombardeados. Médicos Sin Fronteras ha denunciado disparos durante este martes "contra una de las tres instalaciones que están situadas cerca del hospital Al Shifa", que acoge a personal médico y sus familias, entre ellos 65 niños. El personal del hospital de Al Shifa, el mayor de toda Gaza, ha comenzado a excavar este martes una fosa común dentro de las propias instalaciones para enterrar a quienes vayan falleciendo, ya que el asedio no les permite abandonar el centro. Además, la Media Luna Roja Palestina ha advertido de que el equipo médico del hospital Al Quds, también sitiado, sigue "atrapado" en las instalaciones.
En este momento solo funciona en todo el norte de la Franja el hospital Al Ahli, donde se estima que hay medio millar de pacientes. "Todos los hospitales en la ciudad de Gaza y en el norte de la Franja están fuera de servicio debido a la falta de electricidad, de suministros médicos, de oxígeno, alimentos y agua, además de los bombardeos y enfrentamientos a los alrededores", ha afirmado la Oficina de Coordinación de Ayuda Humanitaria de la ONU.
Sale de Gaza un segundo grupo de españoles
Cientos de miles de gazatíes se encuentran en el sur de la Franja tras haber huido del norte. Aunque los ataques en sur son menores, cada día se producen bombardeos israelí también allí. Desde esta región los palestinos con doble nacionalidad tratan de salir a través del paso de Rafah. Este martes un segundo grupo de 74 hispano-palestinos pudo entrar en Egipto, uniéndose a los 40 que abandonaron la Franja el lunes. Se espera que en total salgan cerca de 200 personas, contando con sus familiares.
Una de las españolas que consiguió entrar en Egipto este lunes fue Salsabeel Hamdan, que ha reconocido a EFE que "la salida ha sido muy difícil". "Era complicado para el consulado de España y para nosotros. De hecho algunas familias ni pudieron llegar a Rafah", aseguró esta joven de 28 años. La vida de Salsabeel ha dado un vuelco y ahora tendrá que rehacerla en España. "Iremos a la casa de mis hermanos en Valencia. Esperemos que se acabe la guerra y que podamos hacer una nueva vida, aunque sea aquí o allí, y así podríamos acabar nuestros estudios", dijo.
Los hispano-palestinos que salieron en la jornada anterior ya se encuentran en el Cairo, donde esperaran a que llegue el resto para volar hacia territorio español. Por el momento se desconoce la fecha en la que podrán hacerlo. Mientras, la guerra en Gaza sigue provocando la muerte de decenas de personas cada día. Los combates y bombardeos de Israel en respuesta al atentado de Hamás del pasado 7 de octubre -que dejó 1.400 muertos y más de 240 rehenes- han acabado con la vida de más de 11.300 personas y han dejado 29.200 heridos, según cifras del Gobierno de Gaza, en manos de Hamás.
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