Con la entrada en vigor de la nueva Ley de Bienestar Animal, todos los dueños de perros están obligados a contratar el seguro de responsabilidad civil "por daños a terceros" y que cubra "a las personas responsables del animal", según recoge la normativa.
Esta póliza protege al dueño del animal en el caso de que este muerda a otras personas y se haría cargo de la indemnización si, por ejemplo, provocara destrozos en una propiedad, siempre y cuando no fuera "culpa directa del dueño", según explican desde Idealista, al dejarle suelto en zona prohibida o no lleve puesto el bozal si es de una raza peligrosa.
Respecto al importe, este seguro obligatorio para perros cuesta entre 25 y 30 euros al año, mientras que el precio asciende a 50 euros si se trata de razas potencialmente peligrosas. Además, si se prefiere ampliar la póliza e incluir la asistencia veterinaria, oscilaría los 200 euros.
En cuanto a su contratación, muchos seguros del hogar ya incluyen esta póliza para las mascotas y también existen seguros específicos que "cubren la asistencia veterinaria, la indemnización frente a pérdida o robo del animal, o la defensa jurídica en caso de denuncias", aclaran desde Idealista.
Multas
El seguro de responsabilidad civil para perros es obligatorio desde su entrada en vigor el pasado 29 de septiembre y, por tanto, no contratarlo conlleva una serie de sanciones.
Estas multas pueden ser un mero aviso o conllevar una suma de dinero que varía desde los 500 euros hasta los 10.000 euros en el caso de que el animal causara algún tipo de accidente, avisan desde Idealista.
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