Funcas, el centro de estudios de la fundación de las antiguas cajas de ahorros, vaticina que la economía española sufrirá una importante desaceleración el año que viene. En concreto, este analista prevé que el PIB español pase de crecer un 2,4% en 2023 a un 1,5% el año próximo. Además, esta ralentización, sumada al mantenimiento de algunas medidas de apoyo el año que viene, el incremento en los costes de la deuda o la revalorización de las pensiones, llevarían a España a cerrar con un déficit público del 3,6% en 2024. Un desequilibrio en las cuentas públicas que imposibilitaría, a ojos de Funcas, que España cumpla con las reglas fiscales europeas al menos hasta 2028.

Estos son dos de los principales mensajes que se desprenden de las proyecciones macroeconómicas que Funcas ha presentado este jueves públicamente. Sus previsiones para el año 2023 van alineadas con el sentir general de la mayoría de los analistas. Este año, auguran que la economía crecerá un 2,4%, la misma cifra por la que apuesta el Gobierno  y en la misma línea que lo que marcan el Banco de España o el FMI.

Sin embargo, las expectativas para 2024 son más pesimistas. En ese ejercicio, Funcas espera que el PIB español avance un 1,5%, una tasa de crecimiento suficiente como para mantener a España como una de las economías avanzadas que mejor se comportará en 2024, pero que queda claramente por debajo del 2% que plasmó el Gobierno en el Plan Presupuestario. 

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El agotamiento de motores de crecimiento como el turismo —ya recuperado por completo de la pandemia— o de los acuerdos de recuperación de poder adquisitivo lastrarán el crecimiento el año que viene. No obstante, buena parte del menor avance del PIB de 2024 tiene su origen en esta segunda mitad de este 2023. Esto ocurre así por el conocido como 'efecto arrastre', que provoca que el crecimiento en la segunda mitad del año condicione en buena parte el PIB del ejercicio siguiente. 

El grueso de la ralentización económica se está produciendo ya. Funcas estima que el PIB crecerá apenas un 0,1% en el tercer trimestre. El crecimiento se mantendrá ciclotímico en el final de año y el primer trimestre de 2024, pero después tomará vuelo a partir del segundo trimestre de 2024 para situarse de nuevo en tasas más propias de 2022. 

Incumplimiento de déficit

A diferencia de otros analistas, Funcas es particularmente escéptico con las posibilidades de España de cumplir con la regla de déficit en 2024 como se ha propuesto el Gobierno. El think tank cree que España cerrará 2023 con un desequilibrio en las cuentas públicas del 4,1%, que después se reduciría hasta el 3,6% el año próximo, seis décimas por encima de lo que permiten las reglas fiscales de la UE. De hecho, Funcas no ve el déficit por debajo del 3% en los próximos cinco años.

Respecto a la deuda pública, los analistas del centro de estudios creen que, en ausencia de ajustes fiscales (subidas de impuestos o recortes de gasto) será imposible reconducir la situación. "En ausencia de medidas de ajuste, no está garantizado que la deuda en relación al PIB vaya a seguir una senda coherente con los compromisos europeos", señalan.