Podemos llama a sus bases a construir una fortificación para garantizar que el partido siga existiendo y teniendo capacidad de maniobra. Los morados anunciaron este sábado la convocatoria de una conferencia política para renovar su hoja de ruta para los próximos años. Y, en el documento que se ha puesto a disposición de los militantes para que lo debatan, enmienden y voten durante el próximo mes y medio, plantean unos límites muy claros para repetir la alianza con Sumar en las próximas elecciones, que a priori son las europeas, gallegas y vascas de 2024: respeto a su "autonomía", celebración de primarias para elegir las listas y que la coalición sea "útil, conveniente y eficaz".

El texto que se someterá a las bases es un extenso documento de 27 páginas compuesto por un diagnóstico del actual momento político y por una propuesta estratégica que ahora tendrán que validar los militantes. Las críticas a la líder de Sumar, Yolanda Díaz, se suceden a lo largo de todo el escrito, implícitas en su mayoría, aunque también hay menciones expresas a una candidata que, a juicio de Podemos, ha llevado al partido "a un proceso de 'unidad electoral' duro y profundamente injusto que no ha cumplido con las expectativas y ha derivado en una pérdida de votos y escaños".

Sin embargo, lo más novedoso es la advertencia de Podemos de que Sumar no fue más que una alianza circunstancial para las pasadas elecciones generales y de que Díaz no puede dar por hecho que, en sucesivos procesos electorales, esa coalición vaya a repetirse. "Podemos es una fuerza política autónoma, que tendrá siempre su propia hoja de ruta, su programa, sus órganos de dirección y sus mecanismos de decisión", avisan los morados. Y van más allá: solo se buscarán acuerdos de unidad cuando "esto resulte útil, conveniente y eficaz desde el punto de vista político y electoral".

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Este planteamiento supone un cambio de posición de un partido que, en los últimos años, había hecho bandera de la unidad a toda costa de los partidos a la izquierda del PSOE. Ahora, sin embargo, Podemos circunscribe esa posible unidad a su eficacia y conveniencia, y también a que "exista respeto mutuo a la autonomía de las distintas fuerzas políticas que conformen la correspondiente coalición". Y pone como condición irrenunciable que "las listas de la candidatura se conformen siempre mediante primarias abiertas sin restricciones y sin vetos".

Esta nueva posición abre la puerta a que Podemos concurra en solitario a las próximas elecciones, en especial a las europeas, que se celebrarán el 9 de junio de 2024. Eso es así porque en dichos comicios se utiliza un sistema electoral de circunscripción única en cada país, lo que, en España, a efectos prácticos supone que conseguir un escaño en el Parlamento Europeo cuesta relativamente pocos votos y es mucho más sencillo que en otro tipo de elecciones. En 2019, por ejemplo, la alianza entre PNV, Coalición Canaria y Geroa Bai rascó un escaño con apenas el 2,8% de los sufragios a escala nacional.

A favor del "ruido", contra la "antipolítica" de Díaz

El documento político publicado este sábado por Podemos, no obstante, también incide en varias de las profundas diferencias estratégicas que se han puesto de relieve en los últimos meses entre Sumar y los morados. Una de las que más se denuncia es la crítica que hace Díaz al "ruido", la estrategia seguida por Podemos de llevar a los medios de comunicación algunos de los choques con el PSOE durante la pasada legislatura para conseguir torcer el brazo a los socialistas en medidas incluidas en la ley de vivienda o el ingreso mínimo vital. 

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"Durante toda la legislatura hemos visto cómo se describía como 'ruido' lo que no es sino la justa lucha por políticas valientes y ambiciosas", espeta Podemos en referencia velada a Díaz, a quien también acusa sin nombrarla de haber "claudicado" ante decisiones del PSOE como el envío de armas a Ucrania. Los morados aseguran que la batalla "debe ser dada incluso planteando públicamente las controversias y buscando el apoyo social cuando no se consigue en el gabinete", y afirman que, "sin 'ruido', un Gobierno de coalición es retroceso y asimilación de la fuerza más transformadora a la más conservadora".

Podemos también carga contra la líder de Sumar cuando habla de la "reacción antifeminista" a las políticas del Ministerio de Igualdad de Irene Montero, especialmente la suscitada a raíz de la aprobación de la ley del solo sí es sí y la rebaja de penas a algunos delincuentes sexuales mediante su aplicación. "Tanto el PSOE como parte del espacio político que configuraba Unidas Podemos han cedido ante las presiones de las derechas y se han sumado al falso mantra de que 'el Ministerio de Igualdad ha ido demasiado lejos, ha corrido demasiado con los avances feministas'", espetan los morados en clara referencia a Díaz.

Por último, los morados rechazan frontalmente —y quieren que sus bases refrenden este rechazo— el discurso de Díaz contra los partidos tradicionales, que en los últimos meses se ha atemperado pero que la líder de Sumar utilizó durante todo el pasado año. "Frente a la antipolítica, el personalismo hueco, la retórica contra 'los partidos' y los llamamientos a 'superar las organizaciones' —un discurso nocivo y peligroso de desmembramiento social— hay que poner en valor y defender la organización y la militancia", plantea Podemos.

"Por ello, Podemos no comparte ni compartirá jamás el retorno a una vieja cultura política pre-15M de despacho y de dirigentes que llevan 30 años ocupando cargos públicos y orgánicos", deja caer el documento, sin hacer referencia expresa a nadie en concreto pero con un evidente afán crítico. "Ni tampoco", espetan los morados, "una noción tecnocrática (o peor, aristocrática) del 'gobierno de los mejores'", otro de los conceptos que ha adoptado Díaz desde la formación de Sumar.