Lucha al 'estilo Tarzán' contra el caimán de Toledo: seis agentes para capturar al reptil que mordió la mano de uno de ellos

Los dueños de una finca de Yuncillos (Toledo), no dan crédito con lo ocurrido hace unos días en su propiedad. Y es que los protagonistas de esta historia se llevaron una gran sorpresa cuando al acercarse a una balsa de riego de su terreno, se toparon con un caimán que nadaba tranquilamente en el agua.
Los dueños de una finca de Yuncillos (Toledo), no dan crédito con lo ocurrido hace unos días en su propiedad. Y es que los protagonistas de esta historia se llevaron una gran sorpresa cuando al acercarse a una balsa de riego de su terreno, se toparon con un caimán que nadaba tranquilamente en el agua.
Los dueños de una finca de Yuncillos (Toledo), no dan crédito con lo ocurrido hace unos días en su propiedad. Y es que los protagonistas de esta historia se llevaron una gran sorpresa cuando al acercarse a una balsa de riego de su terreno, se toparon con un caimán que nadaba tranquilamente en el agua.
Momento en el que el caimán muerde a uno de los rescatadores.
Atlas

La historia del caimán encontrado en una balsa de riego de una finca de Yuncillos (Toledo) se ha convertido en todo un fenómeno viral. Si bien los dueños de la propiedad no se podían creer que un cocodrilo rondase por las aguas de su vivienda, esto también fue una gran sorpresa para los expertos que acudieron a su rescate.

La captura se llevó a cabo por dos empleados de la fundación Zoo Koki y cuatro del Safari Madrid, quienes acudieron a la llamada de la Guardia Civil para sacar al animal de esta reserva de agua artificial, en la que aseguran que no llegó por su propio pie, sino que alguien tuvo que colocarlo ahí.

El rescate constó de varios intentos, ya que el caimán estaba nervioso al no estar en su hábitat natural. La red que Fernando, uno de los rescatadores, iba a utilizar para atraparle era demasiado grande para las dimensiones de la balsa, por lo que no le quedo más remedio que servirse de una caña de pescar con su correspondiente anzuelo para enganchar al animal y sacarle del agua a pulso.

Después de forcejear con el reptil, consiguió capturarlo con sus propias manos. Pero así como el rescatador atrapó al caimán, este hizo lo propio con el humano. Y es que en el mismo momento que Fernando cogió al animal, las fauces del animal atraparon una de sus manos, que tuvo que ser extraída con la ayuda de un compañero mediante la técnica de la palanca con un palo, para que el caimán abriese la boca y liberase así la articulación. Por suerte, la herida que le hizo fue poco profunda y el rescatador solo pidió "un poco de hielo" para rebajar la inflamación provocada.

Aunque el rescate fuera largo -ya que los expertos lo intentaron en días diferentes-, ahora este caimán de aproximadamente cinco años -tras el estudio médico realizado una vez rescatado- podrá seguir desarrollándose en unas instalaciones apropiadas para sus características, pues es el Safari Madrid quien se hará cargo de él.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento