La Conselleria de Sanidad se ha visto "obligada a paralizar" la actividad del centro de salud de La Coma, en Paterna, ante la oleada de bajas del personal sanitario desencadenada a raíz de una serie de agresiones y amenazas ocurridas desde hace unos días. La última fue este martes, cuando un facultativo fue "atacado por un paciente", según denunció y condenó el Colegio de Médicos de Valencia. Los sindicatos afirman que en ocasiones se usan armas para las amenazas y califican de "insostenible" la situación del centro sanitario.

En concreto, el cierre, que se produce tras la tercera y última huelga convocada por el sindicato CESM por, entre otros motivos, la sobrecarga de trabajo de los médicos, ha sido decretado por el departamento de salud Arnau de Vilanova-Llíria, del que depende, ante la situación de bajas laborales de los profesionales ocasionadas por las agresiones y amenazas. "Nada más conocerse la noticia se activó el protocolo contra agresiones de la Conselleria y se ofreció apoyo a los profesionales del centro", explicaron ayer desde el departamento que dirige Miguel Mínguez, al tiempo que indicaron que la previsión es que La Coma pueda retomar la actividad de forma progresiva a partir de la próxima semana.

Según la Conselleria, varios trabajadores del centro han solicitado la baja tras las últimas agresiones, por lo que se ha procedido a ofertar estas vacantes a través de la bolsa de trabajo. De momento, solo se atiende en la Unidad de Conductas Adictivas y el área de Salud Mental, y la atención urgente para los ciudadanos adscritos a este centro se ofrece ahora en otros centros cercanos como La Canyada, La Lloma Larga, El Clot (que además cuenta con Punto de Atención Continuada), Campamento y Santa Rita, todos ellos del propio municipio de Paterna y de localidades vecinas como Burjassot. Actualmente, el centro cuenta con dos personas de seguridad y, paralelamente, se ha reforzado la vigilancia por parte de la Policía Local, según las mismas fuentes.

Ante esta situación, el Colegio de Médicos de Valencia ha expresado su más "enérgica condena" respecto a la última agresión a un galeno y le transmitió su solidaridad y respaldo. Desde esta institución avisan de que no dejarán de denunciar este tipo de incidentes, "que menoscaban la salud física y mental de los médicos, y que suponen una lacra para nuestra sociedad". Por ello, instan a todos los médicos a que denuncien, para lo que les ofrecen sus servicios jurídicos.

Desde CCOO lamentaron esta situación y apuntaron que las bajas laborales en el centro de salud de La Coma responden también, en gran parte, "a las amenazas que reciben" los médicos diariamente, "incluso en alguna ocasión con armas", precisaron. Por ello, exigen a la Administración que se tomen medidas para que cese "de una vez por todas" la violencia que sufre el personal "y que está perjudicando su salud, tanto física como emocional".

Por su parte, CSIF también exigió a la Conselleria de Sanidad que adopte "medidas urgentes" para mantener el servicio en el consultorio. El sindicato considera la situación de este centro sanitario público "insostenible" y ha pedido la convocatoria inmediata del Comité de Seguridad y Salud Laboral para abordar la problemática.

El portavoz de Sanidad del PP, José Juan Zaplana, afirmó que la Conselleria "ha pasado de considerar héroe al personal sanitario a desprotegerlo y abandonarlo" y añadió: "La situación es muy grave, toda agresión es injustificable".