A última hora del pasado martes, Emergencias de Palma de Mallorca recibió una llamada que hizo saltar todas las alarmas. Un padre, que junto a sus dos hijos menores de edad, pedía auxilio porque habían sido arrastrados, viéndose atrapados por el agua de un torrente.

La familia intentó cruzar el cauce del torrente, que normalmente no lleva agua, pero acabó siendo arrastrado. Aún así, el hombre pudo llamar al 112 para pedir ayuda. 

Hasta el lugar se acercaron agentes de la Policía Nacional, Bomberos y personal sanitario del SAMU-061. Al final, tanto el padre como sus hijos pudieron ser rescatados con total éxito sin ninguna consecuencia.