Frío polar, viento huracanado, nieve y lluvias intensas salpican a España de la mano de las borrascas Gérard y Fien

Un coche de policía aparcado en una carretera nevada, a 16 de enero de 2023, en Huesca, Aragón (España).
Un coche de policía aparcado en una carretera nevada, a 16 de enero de 2023, en Huesca, Aragón (España).
EUROPA PRESS
Un coche de policía aparcado en una carretera nevada, a 16 de enero de 2023, en Huesca, Aragón (España).
Un coche de policía aparcado en una carretera nevada, en Huesca, Aragón (España).
EUROPA PRESS

Cuando bien entrado enero, tras un otoño templado y un inicio de invierno tibio, parecía que el frío no iba a llegar nunca, las borrascas Gérard y Fien sumirán esta semana a España en un temporal de nevadas, lluvias, oleaje y viento. Los problemas han salpicado ya este lunes a todo el territorio nacional, con avisos en las diferentes regiones y una especial incidencia en el norte peninsular.

Con olas gigantescas de hasta nueve metros, que han motivado la activación del aviso rojo, y temperaturas muy bajas, han comenzado esta semana en el Cantábrico debido al fuerte temporal asociado a las dos borrascas. Este fenómeno ha azotado también el litoral atlántico y ha propiciado el cierre del paseo marítimo, las playas y los parques de A Coruña. El viento que ha generado la aparición de estos fenómenos costeros también ha golpeado a algunas regiones del interior y ha activado avisos en distintas provincias de Castilla y León.

También la nieve ha empezado a caer con intensidad en los puntos más altos de la Península, donde ha obligado a cortar carreteras, y se prevé que la cota se desplome en los próximos días. De hecho, tres localidades del Pirineo navarro -Isaba, Uztarroz y Urzaiqui- han estado este lunes durante varias horas sin luz por una avería y varias provincias de Castilla y León se encuentran en riesgo por este fenómeno, como la montaña de León, la comarca zamorana de Sanabria y la ciudad de Segovia, que ha activado el dispositivo de nevadas y ha pedido colaboración ciudadana en caso de tener que despejar frentes de fachada.

No obstante, el oleaje y la nieve no son los únicos fenómenos que han causado estragos en el noroeste. También la lluvia está castigando la zona y ha provocado el desbordamiento de varios ríos en Cantabria y Galicia y ha desatado la alerta en diversos cauces de Castilla y León. Por el agua, la Diputación Foral de Bizkaia ha cerrado, a las 16.00 horas de este lunes, los accesos peatonales a la Ermita de San Juan de Gaztelugatxe, y, en el municipio orensano de Vilamartín de Valdeorras, las precipitaciones han ocasionado el derrumbe de un puente con la consiguiente incomunicación de 40 vecinos.

Así, el temporal de frío, nieve, lluvia y viento ha obligado a cortar la circulación en, al menos, una veintena de carreteras a lo largo de este lunes, según informa la Dirección General de Tráfico (DGT). Las vías más afectadas se encuentran en las provincias gallegas de Lugo y Ourense, así como Asturias, Cantabria, Soria, Burgos, Palencia, Navarra, Vizcaya y Girona.

Recrudecimiento en las próximas horas

Tras este desapacible inicio de semana, la situación no mejorará con el transcurso de los días. En las próximas horas, el aire polar marítimo se dirigirá a la Península por el anticiclón de las Azores y un gran sistema depresionario en Europa, que está asociado a una vaguada planetaria cargada de aire frío en capas medias y altas, según explica Meteored. Primero la borrasca Gérard y después Fien experimentarán un rápido proceso de ciclogénesis e "intensificarán el flujo de noroestes".

De acuerdo a las previsiones meteorológicas de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), el temporal provocará una caída del mercurio y dejará fuerte oleaje en las costas españolas, salvo en Canarias. En particular, en el Atlántico y el Cantábrico se prevén olas de hasta 9 metros y en el Mediterráneo de entre 3 y 4, por lo que el organismo ha activado el aviso rojo este lunes en el País Vasco y mañana en Galicia. Según las predicciones, soplará viento intenso el martes en Baleares y en la mitad norte y este peninsulares, con rachas que podrían superar los 90 kilómetros por hora.  

A partir del miércoles y hasta el viernes, la cota de nieve descenderá hasta los 300-700 metros en el norte y centro peninsular, sin descartar que pueda bajar aún más, y en torno a los 700-1.000 en el resto de la Península y Baleares, con acumulaciones que podrían superar los 20 centímetros en zonas de la cordillera Cantábrica, montes de León, montañas de Galicia y Pirineos.

Las lluvias caerán de forma generalizada y serán persistentes en Galicia, área cantábrica y Pirineo, con acumulaciones de entre 60-80 litros por metro cuadrado en 12 horas en amplias zonas.

En este escenario y con motivo de las posibles afecciones a la circulación en carretera debido a las precipitaciones en forma de nieve previstas en numerosos puntos de la península, la Dirección General de Tráfico ha solicitado a los ciudadanos que deban desplazarse en coche que consulten el pronóstico meteorológico y el estado de vialidad de las vías, así como que dispongan de cadenas o neumáticos de invierno.

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