Una vez zanjada la renovación del Tribunal Constitucional (TC), que dejó un diciembre cargado de crispación política, el Gobierno y el PP se centran de nuevo en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), aunque en ningún caso parecen acercarse a un acuerdo para la renovación. El primer paso lo dio el PP al registrar en el Congreso, el 30 de diciembre, una propuesta para cambiar el modelo de elección de los vocales de forma que sean los jueces y magistrados de España los que elijan a la parte del Consejo que está compuesta por jueces y magistrados. 

Una propuesta que Moncloa elude porque considera que "lo primero" es renovar el órgano, por lo que no hablará de cambio de elección antes de que esto ocurra. Así lo ha confirmado este mismo miércoles la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, frustrando (como era previsible) las expectativas de la propuesta legal del PP. 

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Según Rodríguez, el partido de Alberto Núñez Feijóo continúa asentado en "la rebeldía constitucional", dado que se niega a pactar la reforma del Consejo desde hace más de cuatro años. Postura irreconciliable con la del propio Feijóo, que llegó a decir el mes pasado que mantenía su bloqueo para "proteger" a las instituciones del Gobierno de Pedro Sánchez. 

Ambas partes coinciden, sin embargo, al afirmar que están proponiendo lo mismo que la Unión Europea. El martes lo hizo el Partido Popular al anunciar la medida que tratarían de tramitar en el Congreso y que, según alegaron los populares, es necesaria para ajustarse al "consenso político, social y de las instituciones europeas". 

El partido hacía referencia a las recomendaciones que la UE recogió este verano en su 'Informe sobre el Estado de Derecho'. Dicho documento instaba a España a renovar el CGPJ "urgentemente" y a impulsar, acto seguido, una reforma como la que ahora ha presentado el PP. Estas dos recomendaciones, presentadas siempre en este orden, las han reiterado en sus visitas a España la vicepresidente de la Comisión Europea Vera Jourová y el comisario de Justicia, Didier Reynders. 

Este miércoles, Isabel Rodríguez se ha referido a las mismas recomendaciones para reprochar la iniciativa del grupo parlamentario popular por que "lo primero" que pide la UE es renovar el Consejo. "Una vez se desbloquee el CGPJ siempre se pude hablar de todo, pero para empezar hay que respetar las reglas del juego", ha apuntado la portavoz. 

La respuesta del PP ha llegado esta misma mañana en boca del coordinador general del PP, Elías Bendodo, que ha señalado una vez más la necesidad de que "los jueces elijan a los jueces, como piden el PP y la Unión Europea". "Vivimos en un país donde hay separación de poderes, pero Sánchez cree que los tres poderes son suyos", ha reprochado Bendodo en su comparecencia desde Málaga. 

El número tres del PP ha recordado que "la Unión Europea ha sancionado a Polonia con un millón de euros al día" por un problema de independencia judicial. "Esperemos que Sánchez sea consciente de que estamos ante la posibilidad de correr este riesgo", ha comentado Bendodo a pesar de que desde la Comisión Europea se ha transmitido reiteradamente que la situación española difiere mucho de la polaca. 

El desbloqueo del Consejo, pendiente desde diciembre de 2018 y frustrado por última vez con la ruptura de negociaciones a finales de octubre, será uno de los asuntos clave de este año electoral. Mientras permanezca caducado, el Consejo no podrá nombrar magistrados para los grandes tribunales del país, que van acumulando vacantes y asuntos pendientes de deliberación.

La presidencia española de la Unión Europea prevista para mediados de año añade aún más presión al conflicto, dado que la Comisión Europea ha solicitado que la renovación se produzca antes de este acontecimiento. Para más inri, si el bloqueo persiste hasta el año que viene, el actual Parlamento perderá la oportunidad de verse reflejado (como corresponde) en la composición del Consejo.