A comienzos de 2022, los pensionistas recibieron la conocida paga extraordinaria o 'paguilla' por parte del Gobierno como modo de compensación del alza del IPC. Se trata de un importe extra para compensar la pérdida de poder adquisitivo, ya que en el sistema previo a 2022, las pensiones se revalorizaban según el IPC estimado a principios de año. 

"Si a final de cada año afloraba alguna desviación negativa por haber sido el IPC estimado inferior a la variación real del IPC, se regularizaba y compensaba a inicios del ejercicio siguiente a través de este pago compensatorio que era la 'paguilla'", explican en el portal Jubilación de Futuro de BBVA. 

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Las pensiones se incrementarán en torno a un 8,5%

Sin embargo, este 2023 será diferente. Con el nuevo método de revalorización de las pensiones, en vigor desde el pasado mes de enero, "las pensiones contributivas se revalorizan cada año según la variación del IPC interanual medio de los 12 meses previos a diciembre del año anterior", detallan.

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De esta manera, las pensiones se actualizarán basándose en el valor medio de los incrementos porcentuales del IPC entre los meses de diciembre de 2021 a noviembre de 2022, de acuerdo con la Ley 21/2021, de 28 de diciembre, de garantía del poder adquisitivo de las pensiones y otras medidas de refuerzo de la sostenibilidad financiera y social del sistema público de pensiones.

Según la estimación del Ejecutivo central, las pensiones se incrementarán en un 8,5%, aproximadamente, a la espera de que finalice el mes de noviembre y se conozca el porcentaje definitivo.