El Gobierno andaluz de Juanma Moreno lleva cuatro años abanderando la bajada de impuesto sobre la base de que "el dinero, donde mejor está es en el bolsillo de los ciudadanos". El presidente ha sacado pecho en repetidas ocasiones de sus cinco bajadas de impuestos en su primera legislatura y ha arrancado la segunda con una sexta rebaja fiscal que afecta al canon del agua, el impuesto de patrimonio y el IRPF.

Con este nuevo paquete de medidas, Andalucía se convierte en la segunda comunidad con menos impuestos tras Madrid, y la Junta, defiende el Gobierno, preserva e incluso aumenta sus ingresos por recaudación al tiempo en que afloja la presión sobre ciudadanos y empresas.

Al término del Consejo de Gobierno que aprobó las medidas anunciadas en Madrid por Moreno el pasado lunes, la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos de la Junta de Andalucía, Carolina España, cifró en 360 los millones de euros que la administración regional dejará de ingresar por estas rebajas y que, a su vez, la Junta "dejará en el bolsillo de los ciudadanos". Son 360 en esta sexta bajada de impuesto –140 millones por el canon del agua, 124,2 por el IRPF y 95 por Patrimonio–, pero con las de la anterior legislatura ascenderían ya a 900 millones de euros.

En el caso del IRPF, en el que se deflactan los tres tramos de competencia autonómica, los beneficiarios alcanzan al 82% de los contribuyentes andaluces y la medida servirá para "ayudar a las familias a hacer frente a inflación desbocada". La consejera facilitó tres ejemplos de aplicación práctica: una madre soltera con un hijo de unos meses, un sueldo de 23.000 euros y una hipoteca de VPO de 300, podría ahorrarse 374,9 euros al año; mientras, un matrimonio de 35 años cada uno, con dos hijos, sueldos de 31.000 euros e hipoteca de 6.000 al año, alcanzaría un ahorro de 493,44 euros; finalmente, en el caso de un jubilado soltero de 70 años, con 26.000 euros de ingresos y alquiler de 500 podría ahorrarse 697 euros anuales.

La consejera defendió que son las familias con rentas medias y bajas las que más se beneficiarán de esta medida, que entra en vigor ya para la renta de 2022 que se declara en el ejercicio de 2023.

Acabar con Patrimonio para traer capitales

Más polémica ha generado la supresión del impuesto de patrimonio en Andalucía, que busca evitar la "huida de capitales" y atraer a grandes contribuyentes a la comunidad para recaudar a través del IRPF y otros impuestos. De este modo, según explicó España, la Administración regional sólo deja de percibir 95 millones de euros al año por Patrimonio, un 0,6% de ingresos tributarios. "No les quepa ninguna duda de que quitar este impuesto, que es un freno a potenciales contribuyentes, va a permitir que se genere más potencial y se vengan a residir y pagar IRPF e IVA en Andalucía", señaló.

Según destacó España, el impuesto de Patrimonio puede estar detrás de la marcha desde 2019 de los 20 mayores contribuyentes de Patrimonio de Andalucía, que podrían haber elegido destino como Portugal o Marruecos (la consejera evitó mencionar Madrid) por criterios de fiscalidad. Con esas 20 'fugas' se perdieron 3,8 millones en Patrimonio y 22 millones en IRPF. Moreno ya estimó el lunes que hasta 7.200 nuevos contribuyentes podrían instalarse en Andalucía al calor de esta medida. Y España recordó que la supresión del impuesto de Sucesiones y Donaciones atrajo a 280.000 nuevos contribuyentes. "Estoy convencida de que esto va a ser revulsivo importante para Andalucía y va a traer recaudación por IRPF", señaló. 

Precisamente esa recaudación evita que la eliminación de Patrimonio pueda ser entendida como una merma para los servicios sociales, ya que, según la Junta, se cubrirán con ingresos por otros cauces. "Ya bajamos este impuesto en la anterior legislatura y con este decreto queremos que Andalucía no sea sólo la mejor tierra para vivir sino también para invertir", explicó España, para quien atraer a los grandes contribuyentes supone también atraer a sus empresas y dinamizar la economía andaluza.

En cuanto a la supresión del canon del agua, éste entrará en vigor el 1 de enero y supondrá una merma en la recaudación de 140 millones euros. La Junta insiste en que no afectará en modo alguno a la ejecución de obras hidráulicas presupuestadas en 1.500 millones de euros. Antonio Sanz, consejero de Presidencia, valoró que esta sexta rebaja fiscal coloca a Andalucía como la segunda comunidad con la fiscalidad más baja. "Nos anticipamos y damos respuestas a las necesidades de los ciudadanos y facilitamos la creación de empleo y la mejora de la actividad económica y de inversión", señaló.