Carlos III es rey desde este jueves, cuando la reina Isabel II falleció en el palacio de Balmoral a los 96 años. Desde ese día, una multitud cada vez más grande se agolpa frente a las puertas del palacio de Buckingham para despedirla, lo que evidencia el fuerte apoyo con el que contaba la monarca. Sin embargo, ¿el pueblo británico respalda de la misma manera a su hijo Carlos? 

Un estudio realizado por Ipsos UK el pasado mayo asegura que, aunque Carlos III estaba entre las figuras más valoradas de la familia real (le apoyaban el 65% de los británicos), solo el 49% cree que debería ser rey. Estos datos contrastan con los de su primogénito, Guillermo, quien acumula unos porcentajes muy superiores: el 81% de los ciudadanos apoya su figura y el 74% cree que debería reinar él. 

Aún así, ninguno de los dos se acerca al buen dato de la ya fallecida Isabel II, que en mayo contaba con el apoyo del 86% de sus ciudadanos. 

Figura adorada de Isabel II

El reinado de Isabel II durante estos últimos 70 años no ha pasado en vano por Reino Unido. La figura de la monarca ha sido muy querida a pesar de sufrir momentos de inestabilidad como la muerte de Lady Di o el conocido como "annus horribilis", por lo que millones de británicos la sienten como parte de su familia.

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Así, hasta un 46% de los británicos opina que su reinado ha sido positivo para el país desde su llegada al trono en 1952; este apoyo se encuentra sobre todo entre las personas de entre 35 a 54 años, ya que son los que han crecido con la figura de la soberana. 

Su gran apoyo de hasta el 86% va a ser difícil de superar, ya que la figura de la monarca y el ahora rey son muy distintas. Carlos III ha mantenido una vida alejada de las obligaciones institucionales y se ha implicado en materia política, por ejemplo cuando, en junio de este 2022, afirmó que la repatriación de los ciudadanos de Ruanda era "espantosa".

Apoyo de los británicos a Carlos III

La popularidad de Carlos III es difícilmente comparable con la de su madre o la de su hijo Guillermo. Tan solo el 49% de los británicos apuesta por un buen trabajo de Carlos III durante este próximo periodo. En cambio, Guillermo cuenta con un 74% en relación al buen desempeño de sus funciones

Asimismo, la edad es un factor que tiene mucho que decir. La mayoría de personas que apostaba por un buen trabajo de Carlos III se encontraban entre los votantes conservadores de mayor edad. No obstante, el príncipe Guillermo era bien visto por todos los rangos de edad y partidos.

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Monarquía vs república

El establecimiento de la monarquía en Reino Unido se remonta a 1660 por lo que los ciudadanos británicos han vivido por más de 300 años con esta institución. Además de la cultura monárquica instaurada en el país, la relación tan unida que sentían los británicos con la figura de la Reina Isabel hacen que el rechazo hacia la monarquía sea mínimo con tan solo un 22% que se inclina por la república. 

Asimismo, el 45% cree que el país funcionaría peor si se aboliese la monarquía frente a un 33% que afirma que no habría diferencias y tan solo un 13% confía en la mejoría con este sistema político.

Ahora bien, en relación al futuro de la corona el pensamiento cambia ya que el 79% confían en que "perdurará en los próximos diez años". A largo plazo el panorama no es el mismo ya que el 40% cree que estará activa en 50 años y un tercio que existirá dentro de 100 años.

Carlos III como monarca

El cargo como rey de Carlos III también causa dudas sobre si "aprovecharía su cargo" en ese periodo; por lo que el 68% defiende que utilizará su figura para enfocarse en el cambio climático; el 55% pensaba que se convertiría en Jefe de Estado de los mismos países que su madre de la Commonwealth; el 45% cree que utilizará su puesto para reducir los miembros de la Familia Real y el 43% para la modernización de la Institución, al igual que su madre.

Donde más discrepancia existe es en relación al lujo que "el país se puede permitir". Un 38% manifiesta que el país no debería gastar tanto frente un 36% que está a favor. Los jóvenes y laboristas son los que se muestran en contra de este gasto.