El intento de asesinato a la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, el pasado jueves en el conocido barrio argentino de Recoleta ha generado todo tipo de reacciones, entre ellas varias teorías sobre la veracidad de este fallido magnicidio. El atacante consiguió colocar una pistola en la cara de Kirchner pero al disparar el arma -dos veces- se engatilló, frustrando así el intento de asesinato. El ataque fue condenado por la mayoría de líderes políticos internacionales, pero, al mismo tiempo, una serie de incongruencias o misterios en torno al suceso han alimentado en redes sociales la idea de que se trata de un montaje por parte del kirchnerismo para beneficiarse a nivel político.
Las balas que se engatillaron, la inacción de sus más de 100 escoltas o la reacción de Cristina -como la llaman en Argentina- ante una pistola semiautomática con cinco balas en el cargador son los hechos que han llamado la atención de los argentinos y que han alimentado las teorías de la conspiración.
Arma sin bala
El principal motivo que despiertan estos misterios se da al atascarse el gatillo a pesar de disparar dos veces. En cambio, Alejo Paredes, exjefe policial de Córdoba ha manifestado al medio argentino eldoce.tv que -según las imágenes que se publicaron- el agresor no realizó el movimiento previo de tirar hacia atrás la corredura para que la bala del cartucho suba.
Asimismo, explicó que también podría deberse al correcto funcionamiento del cartucho o tuviera "pólvora mala, con lo cual falla el cartucho". Recuerda que esto puede darse cuando el cartucho está expuesto en zonas con mucha humedad o es muy antiguo.
Ineficacia de los escoltas
Uno de los primeros momentos que suscitaron curiosidad fue la ausencia de barreras que separasen a Kirchner de la muchedumbre. Esto se debe a que en el intento de colocar vallas se generaron disturbios en el barrio de Recoleta lo que impidió su instalación.
Además, a pesar de contar con más de 100 agentes de seguridad, el agresor consiguió introducir el arma entre la multitud, apuntar a la vicepresidenta a tan solo unos centímetros de su cara y apretar el gatillo. Esta ineficacia por parte de la seguridad de Kirchner pone de manifiesto una gran falta de control, algo habitual en este tipo de situaciones.
Tras el disparo, la vicepresidenta no reaccionó en ese momento y la indiferencia ante el arma ha desembocado en acusaciones de complicidad con el agresor. Esto se ha justificado por la cotidianidad de Cristina al tener móviles, micrófonos cerca de la cara e incluso, sufrir asaltos por parte de la muchedumbre.
Junto a estas conjeturas sobre una posible relación de la seguridad y el agresor, Fernando Andrés Sabag Montiel, se suma que la vicepresidenta siguió hasta seis minutos en la zona, lo que denota carencia de algún plan de acción en este tipo de situaciones.
El exjefe de Policía manifiesta que debían haberla metido en un coche inmediatamente, "esta maniobra se llama encapsulamiento", debido a que "nadie sabe si hay otro tirador y el primero haya sido un acto de distracción". Además, calificó el operativo como "espantoso y realmente inaceptable".
Pruebas del teléfono perdidas
Este pasado domingo otra teoría conspiranoica volvió a surgir tras el "error" al reiniciar el teléfono móvil del principal acusado del atentado fallido durante un peritaje policial. Esto podría hacer que se pierda cualquier información como el contenido del dispositivo y por ende, no servirían como evidencia dentro del juicio.
"Es gravísima la responsabilidad de la jueza, el fiscal y los que manipularon el celular del imputado", escribió en sus redes sociales, el abogado de la vicepresidenta, Gregorio Dalbón.
Es gravísima la responsabilidad de la Jueza, el Fiscal y los que manipularon el celular del imputado.
— Gregorio Dalbon (@Gregoriodalbon) September 4, 2022
De confirmarse la información de algunos periodistas, iniciaremos otra causa contra todos los responsables de tremendo “error” judicial, y/o posible encubrimiento agravado.
Dalbón ha manifestado su intención de calificar el atentado como un intento de feminicidio y ampliar la investigación para buscar cómplices, algo que ya es imposible a través del análisis de dispositivos electrónicos.
Noticia falsa
La publicación del intento de asesinato en la web C5N ha sido otro de los elementos que ha alimentado las teorías conspiranoicas debido a que la noticia aparecía publicada tres horas antes del ataque.
Esto tan solo se debía a un error de la web que utilizaba un huso horario distinto por lo que las redes sociales comenzaron a difundir esta información. Tal y como muestra el código fuente la noticia fue publicada a las 21:37 horas, en horario argentino tras ocurrir el incidente.
Así, un miembro del equipo de Google, el abogado John Müeller, ha manifestado que "el huso horario estaba mal especificado en la página" o Google habría procesado la información erróneamente.
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