Este martes ha amanecido con 3.230 desempleados más, una subida en un mes de julio que no se veía desde 2001, y una pérdida de 7.366 afiliados. Pero el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, considera que los datos de empleo y desempleo se deben "leer con unas lentes distintas" tras meses de aplicación de la reforma laboral, valorando el "cambio estructural" del mercado de trabajo. Eso sí, luego ha dicho que el Ejecutivo "no caerá ni en la euforia ni en el catastrofismo" sobre las cifras.

En rueda de prensa desde el Palacio de La Almudaina, en Palma, tras despachar con el rey Felipe VI, Sánchez ha reclamado "sentido común" y poner en valor que los datos conocidos este martes también demuestran que hay medio millón de afiliados más que antes de la entrada en vigor de la reforma laboral, que ya lleva siete meses de aplicación.

Sobre esto, el presidente ha resaltado que históricamente el mes julio sufría una caída de la contratación de empleos indefinidos en alrededor de 100.000, al tiempo que se aumentaba la temporal. Y, sin embargo, ha resaltado que en julio de este año se aprecia un aumento de la contratación indefinida, "gracias a la reforma laboral", en 145.000 empleos y se sitúa ahora en "máximos históricos". Además, ha señalado que se ha constatado una reducción en 76.000 empleos temporales, una dinámica que se repite "mes tras mes".

"Representa una apuesta clara por la estabilidad laboral y por la certidumbre desde el punto de vista laboral como empresarial", ha recalcado Sánchez, tras enfatizar el "cambio estructural" que ha supuesto la reforma acordada entre agentes sociales y el Gobierno de coalición.

El jefe del Ejecutivo ha aprovechado además esta comparecencia para defender las medidas impulsadas para amortiguar los efectos económicos y sociales de la guerra en Ucrania, como las rebajas selectivas de impuestos para la clase trabajadora, el "apoyo a los más vulnerables" y el reparto de las cargas de la guerra a través de los dos nuevos impuestos a la banca y las empresas energéticas.

"Que los que más tienen más arrimen el hombro y que no sean los de siempre los que paguen las consecuencias de la guerra", ha insistido el presidente sobre el impulso de estos dos tributos.