Competencia concluye que las gasolineras no se están embolsando los descuentos del Gobierno

Varios conductores repostan sus coches en una gasolinera en Alemania.
Varios conductores repostan sus coches en una gasolinera en Alemania.
EFE
Varios conductores repostan sus coches en una gasolinera en Alemania.

La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha concluido este jueves que, "de forma general", las gasolineras están trasladando la bonificación de 20 céntimos por litro a los combustibles aprobada por el Gobierno que entró en vigor el pasado 1 de abril. En cualquier caso, Competencia no descarta que pueda haber estaciones de servicio que "individualmente" hayan absorbido una parte de la bonificación y "aumentado sus márgenes". 

La CNMC alega que los beneficios que se han llevado las petroleras en los primeros cinco meses del año "no difieren significativamente de los márgenes históricos". Además, ha pedido cautela a la hora de evaluar los movimientos de precios y beneficios en el corto plazo, en un contexto en el que las cotizaciones internacionales de los carburantes son muy volátiles. 

En este punto, Competencia señala que el petróleo Brent no es una referencia para los precios de las gasolinas, por lo que se debe mirar a las cotizaciones internacionales de la gasolina y el diésel. Estas cotizaciones habría registrado "incrementos muy superiores a los del petróleo", algo que tradicionalmente no ocurría, pues ambos valores solían ser parejos. 

"Las estaciones de servicio españolas de forma general trasladan, con algún decalaje, la variación de precio de las gasolinas y los gasóleos en los mercados internacionales", zanja Competencia. Es decir, que las subidas de precios que se han observado desde que entró en vigor la ayuda del Gobierno no se deben a que las gasolineras se estén embolsando parte de los descuentos, sino a que ahora pagan más por la materia prima. 

En concreto, la CNMC sostiene que el precio medio para la península y Baleares en mayo fue de 1,929 euros el litro para la gasolina y 1,888 para el diésel, con unos márgenes de beneficios de 21,8 céntimos en el primer caso y 26,8 en el segundo. Cifras "en línea con los valores de 2021 tras un primer trimestre anormalmente bajo en 2022".

La CNMC señala que hay dos factores que pueden explicar por qué han subido tanto esas cotizaciones. Por el lado del gasóleo, la incertidumbre sobre las exportaciones de petróleo ruso explicarían buena parte del alza, mientras que en lo tocante a la gasolina, la fuerte demanda que está recibiendo Estados Unidos con la llegada del verano sería la causa. 

De igual manera, desde Competencia advierten de que no es recomendable comparar los precios de España con los de otros países de la UE. Esto es así porque, a diferencia de otros países, España comunica a la Comisión Europea sus precios de los combustibles sin incluir los descuentos, lo que puede causar que las comparaciones entre países "no sean consistentes". Este mismo jueves, el Boletín Petrolero de la UE reflejaba que los precios de los carburantes en España cayeron ligeramente esta semana, aunque se mantenían por encima de los dos euros el litro, mientras que la media europea se situaba ya por debajo.

La CNMC fue el organismo designado por el Gobierno para vigilar que la subvención a los combustibles se estaba aplicando correctamente, una labor que ya venía ejerciendo habitualmente con publicaciones mensuales de informes sobre el mercado minorista de los combustibles. En caso de que se detectara alguna anomalía, sería la CNMC la encargada de incoar un expediente a la empresa en cuestión.

Dos estudios señalan que sí hay aprovechamiento

Las conclusiones que ha publicado hoy la CNMC contradicen los resultados de dos estudios independientes sobre la materia, uno de ellos difundido este mismo jueves. En el más reciente, tres investigadores de Esade apuntaban a que las estaciones de servicio habrían respondido a la introducción de los descuentos con subidas de precios de tres céntimos en el caso del gasóleo y siete en el de la gasolina.

Desde Esade apuntaban a que las gasolineras independientes y las más baratas habrían subido los precios más que el resto tras la entrada en vigor de los descuentos, mientras que las grandes distribuidoras como Repsol, Cepsa o BP apenas los habrían tocado. La razón, arguyen, sería que las estaciones de servicio independientes están teniendo problema de liquidez para poder aplicar la bonificación, porque el sistema de anticipos diseñado por el Ministerio de Hacienda estaría siendo insuficiente.

Previamente, otro estudio firmado por tres economistas especializados en mercados energéticos postulaba que las gasolineras se habían embolsado unos cinco céntimos de las ayudas. Un extremo que petroleras y estaciones de servicio negaron, alegando que desde que entraron en vigor los descuentos sus márgenes de beneficios se han reducido.

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