El homenaje anual a Blas Infante sirvió de coartada para visibilizar la nueva política de distancia y escepticismo entre el PP y Vox que, una vez pasadas las elecciones, se muestra más enconada que nunca. El presidente reelecto de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, hizo una defensa del "autonomismo útil" en este acto en el Parlamento con motivo de los 137 años del nacimiento del ‘padre de la patria andaluza’. Moreno apeló a mantener "vivo y actualizado" ese legado autonomista y consideró "completamente innegociable" el Estatuto de Autonomía.

"Los logros y aspiraciones que nos ofrece nuestro Estatuto no se tocan, por convicción y por compromiso, porque la nueva mayoría que aspiro a representar es la reafirmación necesaria de los andaluces con nuestro modelo de autonomía constitucional, para decidir con competencias transferidas sobre servicios fundamentales para la calidad de nuestras vidas", expresó.

Vox volvió a ausentarse de una cita que congregó a los representantes y grupos parlamentarios, aún en funciones, si bien el grupo parlamentario mostró su postura en un tuit (luego retirado) que levantó una polvareda: "Juanma Moreno homenajea, junto a PSOE y comunistas, al lunático islamófilo Blas Infante. En Vox tenemos claro que este radical que buscaba dividir a los españoles no merece ningún tipo de homenaje. Andalucía no le debe nada". En la precampaña, el pasado 30 de mayo, Santiago Abascal ya se refirió a Blas Infante como un "pobre hombre". Para Vox, la defensa del andalucismo y el Estatuto del PP es una muestra más de su giro político.

La relación entre ambos partidos, que llegaron a pactar un acuerdo de investidura en 2019, se enfrió hacia el final de la legislatura, pero la incógnita de los resultados electorales y posibles alianzas evitaba un choque directo. Ahora, con la mayoría absoluta en manos del presidente reelecto, Juanma Moreno hace gala de su estilo moderado y con guiños al andalucismo sin depender de su flanco derecho.

Al término del Consejo de Gobierno, el consejero de Presidencia, Elías Bendodo, replicó a Vox: "Estamos en las antípodas de ese calificativo hacia Blas Infante; nosotros sí lo consideramos el padre de la patria andaluza y los andaluces también lo reconocen y merecen respeto. Este es un ejemplo más de que somos partidos diferentes". Para Bendodo, Infante "representa la defensa de los intereses de Andalucía por encima de todo, por delante de cualquier interés político y por encima de cualquier ideología". El portavoz defendió un andalucismo "moderno, moderado, constitucional, que haga compatible el orgullo de ser andaluz y español", y, al mismo tiempo, "beligerante y constante en defender los intereses de los andaluces".

En este sentido, Bendodo insistió en que "el mejor homenaje para defender Andalucía y los intereses de los andaluces" es reclamar un nuevo modelo de financiación autonómica. De hecho, pidió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que aproveche el próximo Debate sobre el Estado de la Nación para comprometerse a iniciar los trabajos en este nuevo modelo. Según la Junta, Andalucía pierde al año mil millones de euros debido a este reparto "injusto". Los reclamos del Gobierno andaluz son los mismos, señaló Bendodo, que los que reclamaba la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, cuando era consejera en Andalucía, por lo que no se explicó su rechazo actual. "Aceptamos su modelo de financiación, el que reivindicaba para Andalucía; no vamos a cambiar un ápice", añadió.

Por su parte, el secretario general del PSOE-A, Juan Espadas, consideró tras el acto de homenaje a Blas Infante que es el momento de hacer una "revisión" del Estatuto de Autonomía para analizar las competencias que no han tenido aún desarrollo normativo. El socialista apeló a "profundizar" en apartados del Estado del Bienestar, "aquellas cuestiones de las que depende nuestro día a día, como la sanidad, la educación, los servicios sociales, las políticas de empleo o las que atienden realidades urgentes". "Hay que analizar bien cómo gestionar esas competencias para ayudar a los que más lo necesiten", concluyo.