Apoyo sin fisuras desde Defensa a la decisión del Ejército de Tierra de cesar al capitán que llevó a su compañía al Valle de los Caídos sin permiso para participar en un acto religioso. La ministra del ramo, Margarita Robles, ha asegurado este jueves que comparte "plenamente" las represalias, que incluyen la apertura de un expediente todavía sin resolver al responsable de la cohorte de militares y que, según ha reconocido, se han tomado sin necesidad de la intervención política. 

En el marco de la presentación del del libro “40 años de participación activa de España en la OTAN”, Robles ha defendido la actuación ante "alguien que se salta la disciplina". En este caso, el desplazamiento "sin autorización" de varias decenas de militares al complejo monumental de El Escorial, para bendecir recibir la bendición del banderín de su compañía por parte de un sacerdote el pasado 26 de mayo, tal y como confirmaron fuentes oficiales del Ejército el pasado miércoles a 20minutos. 

En un vídeo difundido en redes por el periodista de La Marea Miquel Ramos puede verse cómo una compañía del Batallón Ligero Protegido Uad-Ras II, del Regimiento de Infantería Asturias 31, con base en El Goloso (Madrid), recibe de rodillas la bendición de un párroco frente a la cruz de Cuelgamuros. 

Frente a la unidad, un sacerdote predica: "Que el Señor bendiga y guarde siempre a quienes sirven a la patria bajo este banderín. Que el Señor cuide con su providencia a los miembros de esta unidad y a todos los componentes del batallón Uad-Ras y de nuestras Fuerzas Armadas. Que el Señor mire benignamente a España y le conceda la paz con todos los pueblos del mundo".

La ministra Robles no ha querido profundizar más en el tema, arguyendo que su comparecencia no "tenía nada que ver con la presentación". En conversación informal con los periodistas, ha quitado hierro al asunto para devolver el protagonismo a las Fuerzas Armadas, que hace solo unos días celebraban 40 años formando parte de la Alianza Atlántica.