La selección de los nueve miembros del jurado ha dado este lunes inicio en la Audiencia de Girona al juicio al acusado de matar de una patada en la cabeza a un turista italiano en Lloret de Mar el 12 de agoto de 2017 para el que el fiscal pide 24 años de cárcel.
Según el fiscal, el acusado agredió a Nicollo Ciatti "con intención de terminar con su vida o al menos representándosele como probable que pudiera poner fin a la misma", por lo que le acusa de asesinato y le pide una pena de 24 años de cárcel.
Además, pide que una vez cumplida la condena pase 9 años en libertad vigilada y que en concepto de responsabilidad civil indemnice a los padres de la víctima con 105.000 euros a cada uno y con 30.000 euros a la hermana, en total 240.000 euros.
Considera igualmente responsables civiles a la discoteca Sant Trop, donde sucedieron los hechos, y a su compañía de seguros, Axa, la cual, según recoge el escrito de acusación, ya ha abonado más de 180.200 euros a la familia del turista italiano.
El abogado defensor, Carles Monguilod, sostiene que el acusado, Rassoul B., "no tenía intención de matar a la víctima ni cuando le propinó la patada en la cabeza se pudo imaginar que provocaría el fallecimiento", por lo que cree que se trata de un delito de lesiones en concurso con un delito de homicidio por imprudencia grave y pide una pena de entre 1 y 4 años.
Segundo procesado
La fiscalía no acusa a un segundo procesado que también se sienta en el banquillo por esta muerte porque las otras dos acusaciones, de la familia de la víctima y de la patronal de ocio nocturno Fecasarm, le consideran cómplice del crimen.
La familia de la víctima considera que el segundo procesado evitó que los amigos del difunto pidieran auxilio neutralizándoles a golpes y le permitió actuar con más facilidad al dar la patada mortal y le pide 15 años, y la Patronal del ocio nocturno apunta que contribuyó "de manera activa y consciente" al "desenlace fatal" y le pide 12 años.
El abogado de la defensa, Sergio Noguero, sostiene que no estuvo implicado en el crimen y por lo tanto pide su absolución.
Qué ocurrió aquella fatídica noche
Según recoge el escrito de acusación del fiscal, la víctima y otros seis amigos llegaron a Lloret el 5 de agosto y pensaban estar de vacaciones hasta el día 13, la noche antes de su partida, del día 12, salieron de fiesta y sobre medianoche fueron a la discoteca Sant Trop, "que no disponía de ningún vigilante de seguridad para la protección de los clientes del local".
Sobre las 2.17 horas, entraron en el local el acusado y dos amigos –uno de ellos el también acusado como cómplice- y a las 03.00 horas los cinco amigos italianos y el grupo de los otros tres se encontraron en la pista de baile.
Según el fiscal, "por causas que se desconocen, el acusado propinó un empujón a la víctima, que le fue devuelto de manera inmediata" y ante ello el acusado "reaccionó propinándole un fuerte puñetazo en la cabeza que provocó que cayera al suelo por la fuerza del impacto".
En ese momento, "con la intención de terminar con su vida o al menos representándosele como probable que pudiera poner fin a la misma, siendo consciente de la imposibilidad de defenderse por estar postrado en el suelo intentando incorporarse y tener 0,82 gr/l de alcohol en sangre, le propinó una fuerte patada dirigida de manera intencionada a la cabeza".
La patada del acusado, "deportista de lucha libre", “derivó de manera inexorable en la muerte de la víctima por traumatismo craneoencefálico con hemorragia que le condujo a una muerte encefálica”.
Para la acusación pública, "la zona del cuerpo atacada así como el método utilizado, eran idóneos para causar la muerte a la víctima, como sucedió".
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios