La cesta de la compra de los españoles se llena de productos de 'marca blanca' como refugio al alza imparable de los precios. Cuando la inflación supera la barrera del 10% en la categoría de alimentación del IPC de abril, la mayor subida en los últimos 30 años, los cajeros de tiendas y supermercados registran un 43% de productos de marca propia: un incremento del 11,8% en lo que va de año y la cifra más alta desde que existen datos. 

Últimamente, siete de cada diez consumidores dice fijarse más en los precios y posibles promociones, lo que implica una persona promedio más que el año pasado. Y, además, la mitad de los compradores reconoce que hoy por hoy se decanta por llevarse a casa productos básicos en detrimento de novedades que puedan aparecen en el mercado. Así, la simpleza gana terreno a la innovación en el consumo. 

De todo ello da parte la encuesta de NielsenIQ, presentada este miércoles en el 27 Congreso AECOC de Estrategia Comercial y Marketing al alimón de un informe sobre las ventas en volumen y valor del gran consumo. Su estudio concluye: pese a la incertidumbre que la guerra de Rusia y Ucrania ha instalado en la economía de medio mundo y la ulterior caída en el índice de confianza de los consumidores que se ha registrado en los últimos meses, se atisban signos de dinamismo en el consumo nacional para los próximos meses.

El Gobierno aspira a que el tope al gas para bajar el precio de la luz consiga reducir la inflación hasta el 5% o 6% a final de año

Prueba de ello son las buenas previsiones para verano. Tras una "buena" campaña de Semana Santa, el 59% de los encuestados planea salir de casa en sus vacaciones veraniegas y cuatro de cada diez cree que gastará más que el año pasado durante el periodo estival, señalan los datos de AECOC Shopperview.

Los signos de recuperación también riegan sectores especialmente castigados por la pandemia del coronavirus. Así, la restauración acumula un crecimiento del 77% desde enero, mientras que las perfumerías registran incrementos de ventas del 16%.

El gran consumo aumenta un 4,6% su facturación, pero...

Desde la óptica de las grandes superficies, el gran consumo ha acumulado un crecimiento en valor del 4,6% hasta el mes de abril, siguiendo, de esta manera, la senda de crecimiento que marcaron los años de 2020 y 2021, muy condicionados por el confinamiento. "Históricamente el crecimiento del gran consumo ronda el 1 ó 2%, pero la pandemia forzó a los consumidores a optar por los productos para el hogar por el encierro primero y los precios de la restauración después", explican a 20minutos fuentes de la compañía NielsenIQ.

En otras conclusiones, la empresa internacional de servicios de información advierte de que el volumen de ventas del sector ha caído un 1,3% en los primeros cuatro meses del año. Esto podría achacarse a la desbocada inflación de los últimos meses o al paro vivido durante varias semanas del pasado marzo en el transporte, que afectó a la cadena de suministros, desde la producción a la distribución de la mercancía.

La facturación del gran consumo para final de año, en cambio, vislumbra un horizonte más confuso, si bien desde NielsenIQ se aventuran a proyectar un crecimiento del 3,7% al cierre del ejercicio.

"El contexto internacional, la situación inflacionista y las tensiones en las cadenas de suministro dibujan un escenario complejo y de mucha incertidumbre para las empresas del gran consumo", advierte la gerente de estrategia comercial y marketing de AECOC, Rosario Pedrosa.