El Gobierno andaluz ha decidido "no esperar" indicaciones del Ejecutivo central e iniciar el proceso de revisión de los teléfonos del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, y los once consejeros del Gobierno andaluz para determinar si se ha producido algún tipo de infección con el sistema Pegasus, como ha sucedido con numerosos miembros del Gobierno de España. 

El consejero portavoz de Presidencia, Elías Bendodo, explicó tras el Consejo de Gobierno andaluz que dicha "labor de revisión" ya ha comenzado "empezando por el teléfono del presidente". "Andalucía no espera porque no nos fiamos de que el Gobierno nos diga cuándo y cómo", señaló Bendodo, quien destacó que la Junta "tiene sus propios medios" para determinar si ha habido espionaje.

En concreto, de este rastreo se encarga la Agencia Digital de Andalucía, creada en 2021, y a través de la que se gestiona la ciberseguridad de la Junta.

Respecto a las novedades del "caso Pegasus", el portavoz del Gobierno regional lamentó el cese de la directora del CNI, Paz Esteban, por parte del Ejecutivo central. "Es una decisión muy preocupante; un presidente no puede ceder al chantaje de sus socios -en referencia a ERC- porque el siguiente será él. Sánchez comete el error de cortar a cabeza de la directora del CNI para salvar la propia. Este asunto daña nuestra imagen exterior a las puertas de una cumbre de la OTAN en Madrid", explicó Bendodo. 

Además de a líderes internacionales de distintos países, el software de espionaje Pegasus, según se ha sabido estas semanas, ha infectado los teléfonos del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la ministra de Defensa, Margarita Robles, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marñlasa, y políticos independentistas como el president de la Generalitat, Pere Aragonès, o sus predecesores Puigdemont, Mas y Torra.