El PP deja en manos de Mañueco la posible negociación con Vox, que rebaja el tono pero descarta la abstención

  • "No habrá foto de Teodoro en Valladolid", aseguran fuentes 'populares'.
  • ​Aznar: "No veo ventajas para España en que Le Pen estuviera en el Gobierno".
  • El líder de Vox en Castilla y León sigue exigiendo su entrada en el futuro gobierno, pero admite que "pactar es ceder".
El líder del PP, Pablo Casado, este miércoles en el Congreso.
El líder del PP, Pablo Casado, este miércoles en el Congreso.
Ángel Ortiz
El líder del PP, Pablo Casado, este miércoles en el Congreso.

Ni prisas ni presiones. Tanto Génova como los 'barones' del Partido Popular (PP) han acorazado en público la autonomía de Alfonso Fernández Mañueco para negociar la gobernabilidad en Castilla y León. "No habrá foto de Teodoro (García Egea) en Valladolid", explican gráficamente fuentes 'populares', en alusión a aquella imagen del secretario general con Javier Ortega Smith, número dos de Vox, tras las elecciones andaluzas en 2019. Mientras tanto, en la otra trinchera, perseveran en "el derecho y el deber de formar gobierno" de Vox y aparcan, por el momento, la vicepresidencia de Juan García-Gallardo como eje del mensaje. 

Por el momento, Mañueco trata de frenar las pretensiones de Vox de tener, como mínimo, las mismas responsabilidades que Ciudadanos en la anterior legislatura y se escuda en la condición de ganador que, a diferencia que en 2019, tiene el PP tras los últimos comicios. Además, desde el partido proyectan el mensaje difundido por el líder del partido, Pablo Casado, este martes: los "principios" son sus "condiciones". Un punto de partida con el que rechazan exigencias de Vox como la derogación de la ley autonómica de violencia de género, una legislación asumida por el PP y que no pretenden cambiar.

"Queda un mes", recuerdan las mismas fuentes del partido, que allanan el camino para unas negociaciones que posiblemente se estiren hasta consumir los plazos. Unas negociaciones que no prevén incluir ninguna foto de ningún dirigente del PP nacional para evitar el desgaste que podría suponer. 

Mañueco pidió "serenidad y tranquilidad" a los suyos en la junta directiva que presidió el martes. Sin embargo, pese a que el candidato socialista, Luis Tudanca, será quien estrene la ronda de contactos el próximo lunes, la opción de un entendimiento con el PSOE parece totalmente descartada.

Los 'populares' rechazan de manera rotunda la oferta lanzada por el presidente del Gobierno esta semana en el Senado y en el Congreso, después de que Mañueco expusiera que sondearía a los socialistas y Óscar Puente, alcalde de Valladolid, validara esta vía. La abstención a cambio de que el PP rompa "todos los días" y en "todos los territorios" su relación con Vox, que explique por qué tiene que hacerlo y que el PP pida la ayuda explícitamente han sido las condiciones lanzadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este miércoles. Una encrucijada intolerable por los 'populares', que replican aflorando los pactos del PSOE con formaciones "de extrema izquierda, independentistas y terroristas", en referencia a Unidas Podemos, Bildu y ERC. "El PP no va a dejar de ser el PP como el PSOE ha dejado de ser el PSOE", apostillan, y añaden que los socialistas no les van a dar "lecciones de moral".

Para Aznar, Vox está "a la derecha de la derecha"

Tampoco el ex presidente del Gobierno, José María Aznar, se ha querido quedar al margen de la legitimidad del pacto con Vox, partido que sitúa "a la derecha de la derecha". "No veo ventajas para España en que Le Pen estuviera en el Gobierno", ha señalado Aznar en relación a las filias del partido de derecha radical con el Frente Nacional francés. 

"Puedes decir 'menuda cara de vicepresidente que se le está poniendo a este señor'. Pero, ¿quieres que sea vicepresidente de una cosa que te quieres cargar?", ha expuesto Aznar, en referencia a las declaraciones de Abascal en la noche de las elecciones

Vox sigue presionando

Y mientras se mantiene el debate en el PP, Vox se mantiene en su exigencia de entrar en el futuro gobierno de Castilla y León. Por boca de su líder, Santiago Abascal, ha despejado cualquier duda acerca de una posible abstención para facilitar la investidura de Mañueco: votarán "no" si el 'popular' no pacta con ellos.

Eso sí, el que será el interlocutor de Mañueco en las negociaciones, Juan García-Gallardo, rebajó el tono en las últimas horas, asegurando estar dispuesto a ceder en beneficio de un gobierno de coalición. "Pactar es ceder", manifestó, aunque defendiendo igualmente que los votantes de Vox "no son menos que los de Ciudadanos", al recordar que el PP aceptó en 2019 la entrada en la Junta de los 'naranjas' con casi el 15% de los votos.

García-Gallardo diferencia claramente entre Mañueco y Casado. Este último, en su opinión, se ha equivocado "gravemente" al cerrar la puerta a una posible coalición con Vox en Castilla y León e insistió en que su partido no piensa "regalar los votos". 

Mostrar comentarios

Códigos Descuento