El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska ha defendido los "contactos" que Instituciones Penitenciarias mantuvo con el entorno de los presos de ETA asegurando que no implican "negociar" ni dejar de cumplir la ley penitenciaria, al igual que ocurre, según ha dicho, con "condenados por corrupción del PP". Y ha reprochado a los 'populares' que "no puedan vivir sin ETA".

"No hay, no ha habido ni habrá ningún tipo de negociación para la aplicación de la ley penitenciaria", ha declarado Marlaska en el Pleno del Senado al ser preguntado por el parlamentario del PP Fernando Martínez-Maillo acerca de si el ministerio "piensa seguir concediendo beneficios penitenciarios a presos de ETA como pago político al apoyo de Bildu al Gobierno".

"El preso sale de permiso. Me lo dice el responsable de Prisiones": los mensajes del entorno de los reclusos de ETA

Según el senador, tras las informaciones que han desvelado conversaciones entre el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Luis Ortiz, y el entorno de los presos de ETA, así como el informe de la Guardia Civil que "les ha pillado", los ciudadanos "merecen una explicación". Martínez-Maillo le ha preguntado si esos contactos han existido y si los ha autorizado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

En su respuesta, Marlaska ha insistido en que "no hay, no ha habido ni habrá ningún tipo de negociación para la aplicación de la ley penitenciaria", que el tratamiento es individualizado, y que la determinación del centro donde es trasladado el recluso tiene en cuenta la propuesta de la Junta de Tratamiento de la cárcel donde se encuentra y en que la progresión o regresión de grado están controladas por el juez.

Y ha destacado que desde junio 2018 todos los traslados de los presos etarras son comunicados a todas las asociaciones de víctimas y de ellos se hacen eco los medios de comunicación. Un "control social" que ha contrapuesto a lo que se hacía con los gobiernos del PP entre 1996 y 2004, cuando "ETA mataba y secuestraba" y se trasladó a 575 etarras, "en grupo, no con tratamiento individualizado y sin explicarlo a las asociaciones". "Nunca nos apartamos de la legalidad", ha apostillado.

Pero al senador del PP no le ha convencido la respuesta del ministro y ha reiterado que los contactos de Ortiz son una "negociación en toda regla", a la vez que ha reprochado al Gobierno de coalición haber pactado con Bildu, un partido que "no condena la violencia". "Muchos socialistas de bien están avergonzados por lo acuerdos con Bildu, que ni pide perdón, ni condena la violencia ni trabaja para esclarecer los asesinatos de ETA". "Una vergüenza", ha concluido el senador del PP.