La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha convocado para el próximo 7 de febrero la mesa de diálogo con los agentes sociales para negociar un aumento del Salario Mínimo Interprofesional que ahora se eleva a 965 euros brutos en 14 pagas y que los sindicatos, contra el criterio de la patronal de empresarios, quiere hacer crecer a 1.000 euros.

Los problemas para aprobar la reforma laboral y la ley de vivienda amenazan con provocar otro choque en el Gobierno

"El SMI no es un producto político, se trata de mejorar la vida de la gente trabajadora más humilde", ha dicho Díaz antes de un acto de UGT de Cataluña, donde estará este miércoles y el jueves para intentar sumar apoyos al proyecto de Reforma Laboral que se lleva la semana que viene al Congreso de los Diputados.

El apoyo de ERC al nuevo texto es fundamental para que el Gobierno saque adelante la reforma con sus socios de investidura y no tome una vía alternativa que debería incluir a otros partidos como Ciudadanos.

"Es muy difícil decirle que no a esta norma", ha asegurado la ministra, que dice "confiar en la negociación" para que el partido liderado por Oriol Junqueras acabe otorgando sus votos en el Congreso para sacar adelante la reforma. Un apoyo que ya recibió de la formación republicana catalana para sacar adelante normas como la ley rider o la ley del teletrabajo.