La triste muerte de Verónica Forqué ha abierto un debate entre sus amigos del cine, el teatro y la televisión, que, como el resto de la sociedad en general, han pedido que se ponga el foco en la salud mental.

Para Silvia Marsó, compañera de tablas en obras de teatro, la actriz era "una de las mejores personas de la profesión". "Todos, absolutamente todos la queremos y la seguiremos queriendo. Ha sido de las actrices más importantes de este país que va a dejar un hueco insustituible porque como ella no ha habido ni habrá nada parecido", indicó.

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"Era un ángel. La adorábamos todos ha dejado un dolor muy grande. Era una persona muy sensible y llena de luz y lo que se haya podido ver estos últimos tiempos era porque estaba muy enfermita y había que cuidarla", lamentó Marsó. 

"No se encontraba bien, lo que pasa es que, las redes y toda la presión que sufrió, los descalificativos, esos juicios, cuando una persona está enferma... cambia su carácter", dijo también.

Además, en Espejo público la intérprete aseguró: "Todo el mundo se sentía culpable en el tanatorio. Yo no soy la persona más indicada porque hacía mucho que no la veía, pero hay amigos que han estado con ella el viernes y el sábado".

El debate está creado. Tania Llasera considera que la salud mental "no tiene suficiente cabida en este país". "Yo creo que va siendo hora", dijo rotunda.

Por su parte, Toni Acosta ha dicho sobre este tema: "Seguimos sin dar importancia a lo que es la salud mental cuando alguien pide ayuda".

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Sara Sálamo lamenta la muerte de Verónica Forqué e insiste en la importancia de la salud mental y el control de las redes sociales. "Creo que lo importante ahora mismo es destacar el tema de salud mental y, sobre todo, de las redes sociales que no quede impune que puedas acosar, vejar a cualquier persona sin ningún tipo de repercusión y un poquito igual que hablaba de cuidar el planeta, cuidarnos entre nosotros que no es tan difícil y que creo que nos mejoraría mucho como sociedad", ha dicho.

Javi Martín, presentador y actor, que sufre trastorno bipolar, reapareció en Sálvame a raíz de la muerte de la actriz para contar su experiencia personal: "Estuve a punto de quitarme la vida, pero se puede salir", dijo. Por ello, pidió que se dé visibilidad a estos problemas en los medios, que haya "educación emocional desde el colegio", campañas de concienciación y, sobre todo, ayuda profesional en la sanidad pública, algo por lo que se dirigió directamente a la clase política.