La ley de memoria democrática abrirá la puerta a investigar los crímenes del franquismo amnistiados en 1977

Archivo - Familiares de Francisco Franco portan el féretro con los restos mortales del dictador tras su exhumación en la basílica del Valle de los Caídos antes de su trasladado al cementerio de El Pardo-Mingorrubio p
Familiares de Francisco Franco portan el féretro con los restos mortales del dictador.
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Archivo - Familiares de Francisco Franco portan el féretro con los restos mortales del dictador tras su exhumación en la basílica del Valle de los Caídos antes de su trasladado al cementerio de El Pardo-Mingorrubio p
Unidas Podemos y PSOE han pactado que el genocidio y tortura en el franquismo no prescriba.
Europa Press/Archivo

La nueva ley de memoria democrática avanza en el Congreso. PSOE y Unidas Podemos presentaron este miércoles un paquete de 30 enmiendas a esa norma, que se encuentra ahora mismo en tramitación parlamentaria. Esas modificaciones parciales dejarán sin efecto la amnistía en el caso de los crímenes de guerra, lesa humanidad o torturas, se reconocerá a las víctimas del franquismo el derecho a ser resarcidas económicamente y se encargará al Estado realizar labores de difusión sobre el sufrimiento de las víctimas de la guerra y la dictadura.

La ley de amnistía

La nueva ley de memoria democrática permitirá investigar algunos de los crímenes del franquismo perdonados en 1977 a través de la Ley de Amnistía, que fue clave en la transición. Una de las enmiendas presentadas este miércoles por PSOE y Unidas Podemos establecerá expresamente que la Ley de Amnistía debe interpretarse de conformidad al "Derecho Internacional Humanitario", lo que implica que "los crímenes de guerra, de lesa humanidad, genocidio y tortura tienen la consideración de imprescriptibles y no amnistiables".

La portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez.

Esa referencia expresa a la Ley de Amnistía es la manera que tienen PSOE y Unidas Podemos de intentar que la justicia cambie la interpretación jurídica que ha realizado hasta la fecha y pueda investigar los crímenes más graves de la dictadura sin tener que derogar la norma de 1977. Hasta ahora, los intentos de algunos jueces de procesar a los responsables franquistas de algunos de estos delitos -los más célebres, los del exjuez Baltasar Garzón- han caído en saco roto precisamente por la existencia de una amnistía que, en 1977, se pensó para liberar a los presos políticos de la dictadura, pero que posteriormente también benefició a algunos de sus carceleros.

Un fiscal especial para los crímenes franquistas

Según establecen las enmiendas pactadas por PSOE y Unidas Podemos, que con casi total seguridad se incorporarán al texto final de la ley de memoria democrática, la nueva norma contemplará la creación de un Fiscal de Sala de Derechos Humanos y Memoria Democrática. Esa figura será la encargada de abordar la investigación de los hechos que tuvieron lugar con ocasión del golpe de Estado, la guerra y la dictadura, y "se le atribuirán asimismo funciones de impulso de los procesos de búsqueda de las víctimas de los hechos investigados", señala la enmienda.

Derecho al resarcimiento económico

Otra de las medidas pactadas por los partidos del Gobierno ampliará precisamente ese censo de víctimas del franquismo, al cual se incorporarán los supervivientes "que presten su expreso consentimiento". Todas las víctimas, con la nueva ley, tendrán "derecho al reconocimiento y la reparación integral por parte del Estado". Y eso implica reconocer también "el derecho al resarcimiento de los bienes incautados y las sanciones económicas producidas por razones políticas, ideológicas, de conciencia o creencia religiosa durante la guerra y la dictadura", una medida para la cual la Administración estará obligada a llevar a cabo una auditoría en un plazo máximo de un año.

La difusión de los crímenes

Las enmiendas contemplan, igualmente, la creación de una oficina de víctimas de la dictadura y un Centro de Memoria Democrática con participación de las víctimas y sus organizaciones. El objetivo, señala el propio texto legal, es prestar a las víctimas del franquismo "apoyo técnico" y recoger "los testimonios de las personas que padecieron persecución y de sus familiares, así como realizar labores de divulgación y sensibilización sobre los padecimientos y luchas de que protagonizaron las víctimas de la guerra y la dictadura", así como promocionar a través de diferentes actividades "la memoria democrática de los derechos humanos y los valores democráticos".

Supresión de títulos nobiliarios

Otra de las modificaciones pactadas por PSOE y Unidas Podemos al proyecto original es la supresión de 33 títulos nobiliarios concedidos entre 1948 y 1978, algunos de ellos con Grandeza de España, la más alta distinción entre la nobleza y la aristocracia española. Entre ellos, se eliminarán los ducados de Franco, Primo de Rivera, Calvo Sotelo, Mola y Carrero Blanco, así como los condados de Alcázar de Toledo, Benjumea, o Jarama o los marquesados de Queipo de Llano, Saliquet, Kindelán o Arias Navarro.

La identificación de las víctimas de la Transición

La nueva ley de memoria democrática recoge asimismo avances en relación al reconocimiento de las víctimas de la Transición democrática hasta el año 1982, con la victoria del PSOE en las elecciones generales. Se establecerá que "el Gobierno, en el plazo de un año, designará una comisión técnica que elabore un estudio sobre los supuestos de vulneración de derechos humanos a personas por su lucha por la consolidación de la democracia, los derechos fundamentales y los valores democráticos, entre la entrada en vigor de la Constitución de 1978 y el 31 de diciembre de 1982, que señale posibles vías de reconocimiento a las mismas".

Nacionalidad para los descendientes de los brigadistas

Tanto los miembros de las Brigadas Internacionales como sus descendientes tendrán reconocido el derecho a solicitar la nacionalidad española por carta de naturaleza, sin necesidad de renunciar a su anterior nacionalidad, según recoge otra de las enmiendas. En el caso de los descendientes de personas que combatieron por el bando republicano en la Guerra Civil, deberán acreditar "una labor continuada de difusión de la memoria de sus ascendientes y la defensa de la democracia en España".

El Valle de los Caídos vuelve a ser solo Cuelgamuros

PSOE y Unidas Podemos han pactado, igualmente, recuperar en los documentos oficiales la denominación tradicional del Valle de los Caídos: el valle de Cuelgamuros. Según recogerá la nueva ley de memoria democrática, el complejo monumental que albergaba la tumba del dictador Francisco Franco hasta 2019 se convertirá en "un lugar de memoria democrática cuya resignificación irá destinada a dar a conocer, a través de planes y mecanismos de investigación y difusión, las circunstancias de su construcción, el periodo histórico en el que se inserta y su significado, con el fin de fortalecer los valores constitucionales y democráticos".

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