"Eso sería muy pernicioso, muy perjudicial para el desarrollo de este brote final de pandemia del coronavirus del que no nos hemos librado todavía", ha dicho Lambán, en declaraciones a los medios de comunicación, tras reunirse, en Madrid, con la vicepresidenta tercera del Gobierno de España y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.

Lambán ha estimado conveniente que cuanto menos se hable de Fiestas del Pilar, "mucho mejor" para evitar "producir una conciencia entre la ciudadanía de normalidad, de que no pasa nada" y "un efecto llamada sobre el resto de los vecinos de Aragón, que hemos tenido siempre al Pilar como nuestras segundas fiestas" porque "ir por ese camino sería muy peligroso".

Ha recordado que si bien se había considerado que habría inmunidad de grupo al alcanzar al 70 por ciento de la población vacunada contra la COVID-19, ahora los epidemiólogos señalan que para lograrla será preciso alcanzar al 90 por ciento y, por tanto, "no pasa nada por no hacer fiestas en 2021, ya la haremos en 2022 y 2023".

Lambán ha mostrado su confianza en el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, sepa que en los actos que organice la ciudad en los días en que debería haber fiestas se autorizará si cumple con las normas que rigen para todo los municipios.

ACTIVIDADES CULTURALES

El dirigente autonómico ha abundado al señalar que el Consistorio de la capital aragonesa, "que ha sido responsable, como todos los demás", durante la pandemia, "hará lo que han hecho todos, evitar hablar de fiestas y limitar, si acaso, el programa a actividades culturales, siempre y cuando respeten las normas establecidas por el Gobierno de Aragón, aplicables al Ayuntamiento de Zaragoza y a cualquier otro".

"En esto no cabe hablar de privilegios" porque "tan respetable es la vida y la salud de un zaragozano, como de un habitantes de Villalba del Perejil; todos tienen que estar exactamente igual de sometidos a las mismas restricciones", ha esgrimido Lambán.

El jefe del Ejecutivo ha insistido en que para el Gobierno de Aragón, "en materia de preservación de la salud y vida de los ciudadanos, es exactamente igual el ayuntamiento más pequeño que el más grande de la comunidad autónoma" y "hemos tenido claro que si no había habido fiestas en ningún municipio, no podía haberlas en Zaragoza".

A colación, Lambán ha recordado que los Ayuntamientos de las otras dos capitales de provincia en Aragón, Huesca y Teruel, "decidieron no hacer fiestas, ni no fiestas, teniendo incidencias de coronarivus inferiores a las que tiene en estos momentos la ciudad de Zaragoza".

Por eso, ha deseado que no se hable de fiestas, cuando se haga referencia a lo que pueda hacer el Consistorio zaragozano en los días coincidentes con el Pilar, "como han hecho todos los ayuntamientos", para insistir en que en la capital aragonesa se podrá hacer "exactamente lo mismo" que en cualquier otro municipio en cuanto a actividades culturales.