El día a día de Pilar Rubio y su familia ha dado un giro de 180 grados desde que Sergio Ramos dejara de ser futbolista del Real Madrid y empezara su nueva andadura en el PSG.
Sin embargo, este cambio no ha provocado que deje de implicarse tanto con sus entrenamientos deportivos ni que abandone su puesto de trabajo en El Hormiguero.
Así se muestra en redes sociales, donde a la joven se la puede ver continuamente realizando ejercicios para fortalecer todos y cada uno de sus músculos.
En esta ocasión no está sola. La influencer se ha dedicado a hacer sentadillas mientras pasea por un parque parisino el carrito de su hijo Máximo Adriano.
De esta manera, Pilar Rubio demuestra que se puede compatibilizar la maternidad con el cuidado del físico de una misma, sin desatender ninguna de ellas.
Al pequeño le encantan esta manera tan original de pasar tiempo con su madre, mientras le hace reír poniendo diferentes caras.
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