La Convención de Ciudadanos, que tuvo lugar el pasado fin de semana, ha servido al partido naranja para reafirmarse en su espacio político, el liberalismo. Los naranjas confían en sobrevivir y apelan al PP para que finalice la OPA que están llevando a cabo en numerosas cámaras autonómicas y locales, pero también en el Parlamento nacional. A los populares se dirigió este lunes la líder de la formación, Inés Arrimadas, a los que pidió el "cese" del "ataque" para formar entre los dos una alternativa al sanchismo, aunque sin listas conjuntas. 

"Necesitamos una alternativa plural que movilice a diferentes electorados", justificó Arrimadas, que aseguró que los liberales son "expertos" en sacar a gente de la abstención y volver a ilusionarles. "Evitemos operaciones chapuceras como la de Granada y que cese el ataque -insistió-. El objetivo no debería ser atacar a Ciudadanos sino colaborar para hacer una alternativa al Gobierno de Sánchez". En este sentido, hizo un llamamiento también a los socialistas que "no son de Pedro Sánchez".

Bal insiste en la convención de Ciudadanos: "No va a haber fusión con el PP"

El partido, que recientemente ha celebrado su 15ª aniversario, vive su peor momento político desde su salto a nivel nacional encadenando derrotas electorales desde el batacazo de 2019 y ahora, amenazado por un PP que intenta ocupar todo el espacio de centro-derecha, Ciudadanos quiere dejar claras las diferencias con el partido de Casado, que, afirman, "es fundamental". "Respetamos el espacio de otros partidos y queremos colaborar, pero solo nosotros podemos defender a España desde el espacio de los liberales", reiteró Arrimadas, que destacó la presencia de líderes europeos como que acudieron a su convención para arropar y defender este espacio también en nuestro país. Dacian Ciolos, presidente de Renew Europe -el grupo en el Parlamento Europeo- y Alexander-Graff Lambsdorff -líder liberal alemán- compartieron mesa con la jerezana y Luis Garicano.

El liberalismo, defienden en el partido, es el que más sufre por pertenecer al centro político, pero están convencidos de poder salir a flote como sus colegas europeos. "Hay que ampliar el foco y ver lo que han hecho otros partidos en Europa", señaló la de Jerez, que reconoce que cuando se puso a las riendas del partido hace ya dos años -cuando Ciudadanos pasó en cuestión de meses de 57 a 10 diputados-, era consciente de las dificultades que iba a atravesar. 

La formación ha tenido tiempo de hacer autocrítica de los errores cometidos. Uno de ellos fue, a su juicio, no saber comunicar los logros dentro de sus gobiernos, como en el caso de la Comunidad de Madrid, donde muchos votantes eligieron a Ayuso el 4-M por su gestión de la economía en tiempos de covid cuando la Consejería la dirigía Ciudadanos. "Muchas veces somos el pez chico dentro del Gobierno de coalición con el PP y la gente no sabía que estas cosas buenas las llevaba Ciudadanos", reconoció este lunes el vicesecretario general Edmundo Bal.

Otro, reconocido por el portavoz, fue la moción de censura fallida de Murcia, donde pasaron de estar en el Gobierno regional a la oposición y con una fuerte crisis en el grupo parlamentario. "No fue bien explicado ni bien gestionado, nos pudo la precipitación. Igual deberíamos haber advertido a la otra parte de gobierno hasta donde íbamos a llegar", explicó Bal en una entrevista, y recalcó, en cambio, la "magnífica gestión" allá donde han gobernado poniendo el foco en Andalucía, pero también en el Ayuntamiento de Madrid.

En la capital, aseguró Bal, la vicealcaldesa Begoña Villacís ha sido tentada en varias ocasiones para sacar a Almeida de la alcaldía, pero Ciudadanos lo ha rechazado por "lealtad", que es lo que reclaman ahora al PP: "Colaborar codo con codo pero cada uno desde su familia política. Ellos desde los conservadores y nosotros desde los liberales, que también es un espacio fundamental para España y para Europa".