Ha pasado ya más de una semana de la muerte de Samuel, el joven de A Coruña al que mataron de una paliza al grito de "Maricón". De momento, la policía ha detenido ya a seis personas acusadas de haber participado en este crimen, una brutal paliza en la que el joven recibió patadas y puñetazos, según la autopsia.  Tres de ellos se encuentran en prisión, y dos, menores de edad, están retenidos en un centro. 

Las calles, en diferentes manifestaciones, los amigos de Samuel y las instituciones, han mostrado ya su indignación y su tristeza por el crimen del joven gallego. Ahora lo hace una persona más, el padre de uno de los implicados en el crimen: "No tengo fuerza para nada. Estoy muerto en vida ahora mismo", ha declarado a La Sexta.

"La muerte de un hijo es lo peor que puede haber"

El hombre se muestra visiblemente afectado por la muerte de Samuel y por el grado de implicación que haya podido tener su hijo. Dice no saber "lo que hizo cada uno", pero sí que sabe que su hijo "está implicado en el asesinato", y, por lo tanto, tiene una "culpabilidad dentro". 

Recalca que quiere darle el pésame a la familia de Samuel aunque sabe que "no vale para nada" porque el dolor que están sintiendo en este momento tiene que ser demasiado grande. Pero recalca que se pone "todos los días en el sitio de la familia".

"Es terrible, la muerte de un hijo es terrible, lo peor que puede haber. Pero que te quiten un hijo así de esa forma...es terrible", declara el padre del agresor, que no puede imaginarse el dolor que puede estar sintiendo la familia.

Solo quiere decirles que "estoy sufriendo con ellos el dolor de su hijo y aparte por lo que me toca" y repite en varias ocasiones lo mucho que lo siente y que lo único que quiere es "que se aclare todo".