Esta coreografía está documentada por el historiador Jimeno Jurío y el folklorista Patxi Arraras, y también está plasmada en el cuadro que realizado por el pintor español Juan Bautista Mazo tras una visita a Pamplona en 1646 con el rey Felipe IV, también aparece una soka-dantza.

Duguna Folklore Taldea baila la soka-dantza sólo dos veces al año, una coincidiendo con el día de San Blas y otra el día de San Juan, con la que pretende celebrar y festejar las fiestas de invierno de la ciudad y la llegada del sol y la luz entorno al inicio del verano, respectivamente.

En la coreografía un grupo de personas une sus manos formando una cadena, dirigida por el primer y el último de los bailarines, y organizada en corro. En un baile emparentado con las con danzas en cadena, branles y farandoles que se bailan en el sureste de Europa desde la Edad Media. En Navarra, según las zonas, ese tipo de bailes se conocen como 'dantza-luze', 'trapatán', 'zortziko', 'giza-dantza', 'ttun-ttun' o 'pañuelo-dantza', entre otras.

Precisamente este baile, 'San Juan Bezperako soka-dantza', es uno de los inscritos en el Registro de la Propiedad Intelectual y que, dada su exclusividad, pesa a la hora de la contratación habitual de Dantzaris de Pamplona / Duguna Iruñeko dantzariak por el municipio. El grupo de danzas municipal participa habitualmente en los actos protocolarios del Consistorio en el que el Ayuntamiento desfila en cuerpo de ciudad, además de comprometerse en otros eventos como las fiestas de San Fermín de Aldapa o la celebración de San Blas.