La movilización ciudadana ha parado este martes el desahucio de una mujer en Barcelona, a quien la propiedad quería expulsar con el argumento que había incumplido el contrato de alquiler al hacer obras en el baño. Así lo han anunciado entidades como el Sindicato de Vivienda del Poblenou, que ha celebrado que se haya parado el desalojo de Teresa. 

Según betevé, esta vecina hace 42 años que vive en un piso de la Rambla del Poblenou con un contrato de renta antigua y había cambiado la bañera por un plato de ducha con el consentimiento verbal de la propiedad. 

El cambio tenía que ver con el hecho que está diagnosticada de obesidad mórbida y quería adaptar el baño para hacerlo accesible. Las obras no habían supuesto un problema hasta que la gestión cambió de manos.

Ahora, el inmueble está gestionado por descendentes de la propietaria a través de la sociedad Sardà Argilagos CB y la propiedad ha rescindido el contrato a Teresa por incumplimiento.