El fiscal acusa al hombre de un delito de allanamiento de morada con agravante de parentesco y pide para él 18 meses de prisión, prohibición de acercarse a la mujer a menos de 300 metros durante cuatro años o a comunicarse por cualquier vía, así como indemnizarla con 2.000 euros por daño moral.
El escrito de calificación explica que la pareja, que tiene un hijo, terminó la relación abril de 2017 y él abandonó el domicilio común en Carballo. Ella cambió las cerraduras del piso, pero en junio de ese mismo año, el hombre "accedió al interior de la vivienda sin el consentimiento de ella" y la esperó. Al llegar a su casa, la mujer "solicitó auxilio a la Guardia Civil" que llegó cuando el acusado aún estaba en su interior.
Según el Ministerio Público, no hubo "desperfectos de ningún tipo" en el piso, pero sí que la mujer, añade, "vio alterada no solo su intimidad sino su tranquilidad al desconocer los propósitos de su expareja al introducirse en su domicilio".
Aunque está fijado como un juicio con Tribunal del Jurado, desde el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) precisaron la semana pasada que no se citó a sus miembros al estar previsto, "en principio" un acuerdo entre el acusado y Fiscalía.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios