La borrasca Filomena ha dejado a gran parte de la Comunidad de Madrid incomunicada debido al colapso de las principales carreteras. El equipo de Espejo público se ha encontrado con dificultades para poder llegar a las instalaciones de Atresmedia situadas en el pueblo de San Sebastián de los Reyes. 

Una de las más afectadas por el temporal ha sido, precisamente, la presentadora, Susanna Griso, que no ha podido sacar su coche para ir a trabajar. Tras pasar el fin de semana confinada en su casa de Madrid, la comunicadora se ha encontrado su vehículo cubierto por una rama, aunque según ha explicado ella misma, las dimensiones de la rama no son muy grandes y el coche solo ha sufrido un rasguño. 

El equipo de producción ha tenido que recoger a la presentadora en un todoterreno, al igual que al resto de los colaboradores que han llegado a la redacción en 4x4. Algunos han salido desde sus casas y otros tuvieron que hacer noche en un hotel, ante la imposibilidad de llegar a sus casas por carretera. 

Lorena García y Diego Revuelta han compartido hotel para estar más cerca de las instalaciones de Antena 3 y poder llegar a plató de una manera más fácil. Otros, como el colaborador Gonzalo Bans, han optado por utilizar el transporte público. 

Dificultades para llegar a plató: carreteras cortadas y hielo en las calles

Todo el equipo de Espejo público ha logrado llegar a tiempo para empezar programa, excepto Nacho Abad. El colaborador no ha podido llegar al plató al no poder acceder a la N-1. El periodista ha asumido este lunes un papel de reportero y a través de videollamada ha informado en directo sobre la situación en la M-30.

Otros de los factores ha tener en cuanta con este temporal es la vestimenta y el calzado, lo ideal es usar ropa impermeable y botas de montaña para poder caminar por la nieve. No obstante, parece que Diego Revuelta no ha seguido los consejos de los expertos y ha salido a la calle con unas zapatillas de deporte que de poco le han servido. 

El colaborador ha contado que se le rompió una zapatilla en mitad del camino y que ha tenido que coger prestados un par de zapatos de su compañero, Óscar Castellanos. Lorena García, por el contrario, ha sido la más preparada y ha llegado a la redacción con la equitación de nieve al completo: ropa térmica, botas de montaña y batones para caminar.