Los bomberos desplazados hasta el lugar, según informan, comprobaron cómo la combustión de una estufa había provocado la acumulación suficiente de monóxido, hasta el punto que los afectados sufrían desmayos y mareos.

La central del 112 recibió la alerta sobre las 22,45 horas del viernes a través de la llamada de una persona particular que solicitaba ayuda para dos miembros de la familia, porque experimentaban una sensación de malestar general.

Así, los gestores del servicios de emergencias pusieron los hechos en conocimiento de los profesionales del 061, que, tras establecer comunicación con el alertante, notificaron la necesidad de intervención por parte de los bomberos ante la sospecha de intoxicación por monóxido de carbono.

Enseguida, desde el 112 se pasó aviso a los bomberos de Cee, a los agentes de la Guardia Civil, a los efectivos de Protección Civil de Fisterra y a la empresa suministradora de combustible de la zona.

Una vez en el lugar y tras realizar las mediciones pertinentes, los equipos de emergencia confirmaron la acumulación nociva de gas en el domicilio, cerraron el suministro y ventilaron la estancia.