La decisión de extender el cierre perimetral de Madrid al mes de noviembre quedará en manos de los partidos que precisamente más han criticado a la capital española en las últimas décadas. Eso, en caso de que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, necesite acometer una prórroga del estado de alarma si en estas dos semanas no contiene la pandemia. 

El PSOE tendría así que recurrir a ERC, PdCAT, Bildu o el PNV para alargar la medida que aprobó este viernes por decreto, ya que necesitaría el sí del Congreso de los Diputados para que el confinamiento fuera más allá del 24 de octubre. Según la Constitución, el presidente puede decretar el estado de alarma por primera vez sin el aval de la Cámara Baja, pero para las prórrogas sí necesita de sendas votaciones, ya sean por mayoría simple o absoluta.

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El alargamiento del confinamiento perimetral de Madrid, que Sánchez espera no acometer porque confía en "establecer" la curva en estas dos semanas, estaría en manos de los partidos que, en su mayoría, forman parte de la llamada mayoría de la investidura. Además de las ya mentadas, también lo son Más País, Nueva Canarias, Teruel Existe, BNG o PNV, aunque este último ha mostrado reticencias. 

El parlamentario del PNV en el País Vasco Luis Javier Tellería ha tildado este sábado de "preocupante" que se pueda "laminar la capacidad autonómica de regular la salud" ya que, a su juicio, "muestra la debilidad del estado autonómico".

Más proclives al paso que dio Sánchez el viernes se mostraron Bildu y Más País. El parlamentario de Bildu Iker Casanova aseguró defender la "plena soberanía y la independencia" pero advirtió que la misma "hay que llenarla de contenidos". Por su parte, Íñigo Errejón criticó "la irresponsabilidad y el fanatismo de uno y el titubeo y el cálculo político de otros" pero celebró la llegada, aunque tardía a su juicio, del estado de alarma.

El otro camino para que el destino de Madrid no quede en manos de formaciones que batallan para descentralizar su poder sería optar por la vía Ciudadanos, como está ocurriendo en la negociación de los Presupuestos Generales del Estado para 2021.

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Descartados por razones obvias el PP, Vox y Navarra Suma, el presidente sumaría lo necesario si, como ya hizo en alguna de las prórrogas de mayo, lograse convencer a los naranjas y al PNV. Eso sí, es improbable que Inés Arrimadas y sus nueve diputados dieran el 'ok' a prorrogar el estado de alarma en una autonomía en la que gobiernan en coalición con el PP.

Pese a que las restricciones impuestas por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, fueron acordadas con el vicepresidente de Madrid y también líder de Cs en la autonomía, Ignacio Aguado, los naranjas han rechazado las formas del Ejecutivo. Aguado llegó a compartir en su Twitter una vez declarado el estado de alarma un mensaje en el que declaraba que esa intervención era "evitable" y pidió disculpas a los ciudadanos por el "fracaso" de "los políticos". También Arrimadas optó por una especie de tercera vía y pidió a Ayuso rehacer la orden del Gobierno para aumentar las restricciones y cerrar Madrid y evitar, de paso, la declaración del estado de alarma.