Según los datos de ocupación hotelera de Hosbec, en las zonas analizadas el mercado nacional ha sido el "salvador" en una temporada estival atípica y llena de incertidumbre y han sido los destinos menos dependientes del turismo internacional los mejor parados en materia de ocupación.

El perfil de turista más común ha sido el de familias y el propio turista interno de la Comunidad, optando principalmente por estancias de fin de semana.

Por su parte, el mes de septiembre comienza según lo esperado, con previsiones a la baja en las diferentes zonas, viéndose afectado por el comienzo del curso escolar, el final del verano y la ausencia del turismo internacional.

En Benidorm, en la última semana de agosto (del 24 al 31), el porcentaje de planta hotelera abierta ha sido del 65%, con alrededor de 26.000 camas disponibles. La localidad ha cerrado agosto con un 51% de ocupación en hoteles, un 28% en apartamentos turísticos y un 79% de ocupación en campings.

La previsión hotelera para la primera semana de septiembre se sitúa en un 29%, haciendo más que visible el descenso de ocupación que se espera a corto plazo.

Sin embargo, a pesar del verano atípico vivido durante este 2020, el sector hotelero de la capital de la Costa Blanca logra un 55% de ocupación durante el mes de agosto. Se impone como protagonista el mercado nacional, que alcanza una cuota mensual del 84%.

En el conjunto de la Costa Blanca, sin incluir Benidorm, hay abierto un 70% de la planta hotelera, con en torno a 25.000 camas disponibles.

En la última semana de agosto los hoteles de esta zona volvieron a marcar una vez más el mejor registro en relación al resto de zonas, con un 61% de ocupación media. Dato que cierra agosto con una media mensual del 63%. El mercado nacional continua siendo el motor y da el último empujón a la Costa Blanca, aglutinando al 91% de la del total de la demanda.

No obstante, la previsión para la primera semana de septiembre desciende a un 40%.

En la provincia de Valencia la última semana de agosto estaba abierta el 84% de la planta hotelera, alrededor de 28.000 camas disponibles, y ha registrado un 46% de ocupación media, dejando en el camino 10 puntos en relación a la semana anterior. Con este dato se pone el broche a un agosto atípico con una ocupación mensual del 48%.

La provincia estrena septiembre con una previsión del 30% para la semana, un dato de ocupación semejante al de comienzos de julio donde comenzaba la reanudación de la actividad turística.

En cuanto a la provincia de Castellón, el porcentaje de planta abierta estaba en el 56% (alrededor de 13.000 camas disponibles) y registró un 56% de ocupación en la última semana de agosto. Aunque desciende respecto a las dos semanas anteriores que marcaban los máximos del verano, logra posicionarse con la segunda mejor ocupación mensual, con un 57% de media.

El mercado nacional mantiene su hegemonía con un 94%, mientras que sólo el 6% son turistas internacionales.

La previsión para el inicio de septiembre es en estos momentos del 37%, una caída acentuada, sobre todo por la pérdida del turismo nacional familiar que, en su mayoría, ponen fin a sus vacaciones por el inicio del curso escolar.