El pasado 21 de abril la reina Isabel II cumplía 94 años, pero el estado de alarma en Reino Unido provocado por la crisis del coronavirus impidió a Su Majestad celebrarlo como en otras ocasiones, por ello, semanas después, ha tenido lugar un pequeño evento ceremonial, específicamente diseñado para garantizar el distanciamiento entre los soldados.

Esta celebración ha sustituido a la tradicional Trooping The Color que desfila por el centro de Londres y que ha tenido que cancelarse por la pandemia y las medidas de seguridad que los ciudadanos británicos deben cumplir. En esta ocasión ha sido un desfile diseñado en dos semanas y exclusivo para esta inusual situación, tal y como informa Sky News.

Esta ha sido la primera aparición pública de la monarca desde que comenzó la crisis del coronavirus y, desde luego, ha sido muy extraño para todos. Por lo general, miles de personas se reúnen frente al Palacio de Buckingham para ver el desfile militar para ver a los miembros de la Familia Real en sus carruajes y a caballo. 

Sin embargo, este año, por primera vez desde 1955, se ha pedido a los británicos que se mantuvieran alejados de la ceremonia, ya que tendría lugar dentro de los terrenos del Castillo de Windsor y no se realizaría el desfile normal.