El portavoz del Comité de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé, ha interpretado este lunes que la afluencia a la manifestación del domingo por el Día Internacional de la Mujer “fue baja porque normalmente ni los españoles ni las mujeres suelen acudir a aquelarres organizados por una izquiera sectaria”.

Preguntado al respecto en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal de la Ejecutiva, Buxadé enjuició que “cualquier mujer que se respete a sí misma no puede participar en un acto político donde se pretende enfrentar, con auténtico resentimiento, a los hombres con las mujeres”.

A su juicio, este tipo de manifestaciones "intentan dividir a los españoles" y ningún miembro de su partido acudió a la concentración, que coincidió con su Asamblea General Ordinaria. Según Buxadé, en ese congreso las dirigentes de Vox Rocío Monasterio y Macarena Olona “expusieron con sentido común cómo se sienten millones de mujeres al ver a esa izquierda sectaria que quiere hablar en nombre de las mujeres”, cuando eso sólo lo puede hacer “cada una de ellas”, y no otra organización o “grandes empresas, del Ibex o no del Ibex”, ha ironizado dando a entender que las que canalizan y aprovechan las protestas de las mujeres también lo son.

"Me llamaron machista e hija de puta"

Desde Vox han calificado de aquelarre el escrache vivido por los miembros de Ciudadanos que sí acudieron a la concentración. Una de las asistentes, la portavoz adjunta de Ciudadanos en la Asamblea de Madrid, Ana García, ha explicado este lunes en la Comisión de Mujer del Parlamento regional que en la manifestación para conmemorar el 8-M le llamaron “machista e hija de puta”.

Ha explicado que, además de la violencia verbal contra Ciudadanos, sufrieron amenazas con sprays e intentos de agresiones físicas: “Una de esas radicales se abalanzó sobre mí y me llamó machista e hija de puta y gracias a un compañero no llegó a más”, ha explicado.

García ha reconocido que después de tener que abandonar la concentración, tuvo una “inmensa sensación de injusticia” e indicó que su partido es "es el mismo que impulsó el pacto de Estado contra la violencia de género”. “Soy la misma que lleva 15 años asistiendo legalmente a mujeres víctimas de violencia machista, en el turno de oficio”, ha sostenido..