El PSOE presiona al PP para que se abstenga en una investidura antes de la repetición de elecciones

La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo.
La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo.
EFE
La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo.

Día nuevo, vida nueva. Un día después de la investidura fallida de Pedro Sánchez, el PSOE ha dejado este viernes claro que cambia de dirección. No habrá coalición con Unidas Podemos, porque esa posibilidad desapareció con la votación en el Congreso de este jueves, y el presidente en funciones reflexionará sobre sus próximos "movimientos", de la misma manera que el resto de partidos tiene que hacer los suyos. En particular, el PP, a quien la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ha señalado este viernes como uno de los actos principales en las próximas semanas.

"El líder de la oposición es el señor Casado, tendrá que asumir si lleva a este país a elecciones o si deja que se abra paso la voluntad de las urnas, que en mayoría minoritaria han dicho que haya un gobierno progresista", ha dicho desde la sala de prensa de La Moncloa, al término del Consejo de Ministros de un Gobierno que sigue estando en funciones.

Con poca autocrítica, Calvo ha responsabilizado del fracaso de la investidura a los partidos que de una forma u otra podrían haberla evitado, Unidas Podemos, PP y Ciudadanos. Sánchez y el PSOE no tienen culpa porque, ha dicho, "lo hemos intentado absolutamente en serio", bien ofreciendo una coalición a Pablo Iglesias y también reclamando a PP y Ciudadano que se abstuvieran.

El escenario que se abre ahora es distinto porque "ahora no hay candidato a la investidura", lo que según la vicepresidenta, obliga a todos los partidos a moverse. "Como no lo hay, cualquiera puede asumir esa condición con el encargo de rey. La responsabilidad no es eludible, quien eluda la responsabilidad ahora lleva al país a elecciones. No seremos nosotros, nosotros las hemos ganado", ha dicho en alusión a los tres grandes partidos con los que Sánchez ha estado en contacto de cara a su investidura y con los que cuenta seguir hablando, aunque en circunstancias muy distintas.

Sin vacaciones

El Gobierno no irá de vacaciones y habrá Consejos de Ministros todos los viernes de agosto, menos el día de 16. Esto coincide con el llamamiento que ha lanzado este viernes la número dos de Podemos, Irene Montero, para seguir negociando durante el mes de agosto. Sin embargo, los planes de Sánchez no pasan ya por tener a los morados como una prioridad. Mientras ve qué "movimientos" hace o qué escenarios "explora", Calvo ha sugerido que, más que ha una coalición que se da por descartada, el PSOE mira ahora más hacia la abstención del PP. "Cada líder se va a mover como considere oportuno para saber qué dirección puede tener apoyos", ha dicho.

Calvo se ha referido sobre todo a Casado, debido a las relaciones "inexistentes" que existen en estos momentos entre Sánchez y el líder de Ciudadanos, Albert Rivera. Así lo dijo anoche el presidente y este viernes la presidenta ha recordado que Rivera ya se negó a reunirse con Sánchez, al que en la sesión de investidura llegó a denominar "el líder de la banda".

Llamamiento a Casado

Volviendo a Casado, la vicepresidenta ha vuelto a mencionar el principio de la "lista más votada" por el que debería ser investido Sánchez, lo que vuelve a descartar una coalición con Unidas Podemos y retoma el guiño que el PSOE hizo al PP hace unas semanas con algo que la vicepresidenta ha aventurado que probablemente gusta más a los votantes populares que a los socialistas.

Además, el PSOE también está dispuesto a hablar con el PP de pactos de Estado como los que Casado ya ha propuesto en ocasiones anteriores a Sánchez, algunos de los cuales este mencionó en su discurso del lunes pasado, en materias como infraestructuras, agua o una reforma constitucional para evitar bloqueos como el actual. "Con el PP nos pueden unir grandes pactos de política de Estado que se han hablado entre Casado y Sánchez".

Fin de la coalición

Igual que este viernes el PSOE ha tenido la mano al PP para que se abstenga, la puerta a una coalición con Unidas Podemos parece totalmente cerrada ya, a pesar de que los morados se han empleado a fondo esta mañana en reclamar la vuelta a la mesa de negociación.

"El Gobierno de coalición está rechazado y rechazado queda", ha dicho, tajante, Calvo que ha recordado que Unidas Podemos rechazó una "oferta razonable y equilibrada". "Ellos la han rechazado, no nosotros" y ha añadido que "rechazándola se han colocado en un espacio que es ahora el que les corresponde".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento