El fabricante de coches japonés Nissan Motors cayó este martes un 5,45% en la Bolsa de Tokio, tras el arresto en Japón de su presidente, Carlos Ghosn, quien también dirigía la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, por supuesta evasión fiscal.

El precio de las acciones de Nissan bajó  hasta los 950,7 yenes (7,38 euros), aunque llegó a situarse en 940 yenes (7,29 euros), un 6,5 % por debajo del cierre de la sesión previa. La cotización de la empresa nipona, incluso, estuvo suspendida los primeros minutos de negociación por el elevado volumen de ofertas de venta.

Esta caída llegaba después de que este lunes las autoridades japonesas detuvieran a Carlos Ghosn, quien, al parecer, no declaró al regulador bursátil de Tokio sobresueldos que ascienden hasta los 38,7 millones de euros (5.000 millones de yenes). Esta irregularidad fue detectada y denunciada por la propia empresa en una investigación interna; ahora, la compañía pide el cese de Ghosn, que se espera que se produzca este jueves.

De forma similar, Mitsubishi Motors propondrá a su junta directiva el cese del empresario franco-brasileño y abrirá una investigación para dilucidar si Ghosn ha estado implicado en "conductas indebidas" dentro de la empresa. Mitsubishi se ha visto, al igual que Nissan y Renault, fuertemente perjudicada en bolsa; su caída de este martes se cifró en un 6'85%, habiendo alcanzado el 7,8%. En el caso de Renault, cerró el lunes con una caída de un 8,43%.

Además de Ghosn, el estadounidense Greg Kelly, también directivo de Nissan, se ha visto igualmente implicado en las irregularidades fiscales, habiendo sido denunciado por la empresa.

Mientras, el grupo francés Renault decidió este martes nombrar a dos responsables de forma interina al frente de la compañía para reemplazar en sus funciones a Carlos Ghosn, quien permanece como presidente "temporalmente impedido", anunció la compañía en un comunicado.

Reunido de urgencia, el Consejo de Administración de Renault resolvió que el consejero Philippe Lagayette presida de forma interina sus reuniones y que el hasta ahora director general adjunto Thierry Bolloré asuma las máximas responsabilidades ejecutivas de Ghosn, detenido enpor presunta malversación.

"Ghosn, temporalmente impedido, sigue siendo presidente director general", explicó el Consejo de Administración de Renault, "que no está en disposición de pronunciarse sobre los elementos de los que disponen Nissan y las autoridades japonesas" contra el empresario.

El consejo recordó que las medidas adoptadas son "provisionales" y tienen el objetivo de "preservar los intereses del grupo y asegurar la continuidad de sus actividades operacionales".

Los administradores de Renault pidieron a Nissan que "sobre el fundamento de los principios de transparencia, confianza y respeto mutuo de la Alianza, le transmita el conjunto de informaciones en su posesión en el marco de las investigaciones internas de las que es objeto Ghosn".