La madre de Rodrigo Lanza, el presunto causante de la muerte de Víctor Laínez en Zaragoza, supuestamente a cuenta de unos tirantes con la bandera de España, ha emitido un comunicado después de su primera visita a prisión en el que asegura que su hijo "podría estar muerto, pero se defendió y está vivo".

La madre de Lanza escribe que, después de mirarse mucho tiempo, su hijo le contó lo sucedido en el bar El Tocadiscos, donde tuvieron lugar los hechos. En el comunicado, destinado a aquellos que le están llamando para preguntar cómo se encuentra la familia y darles apoyos, no da muchos detalles sobre la versión de su hijo, pero defiende que lo atacaron y se defendió.

Mariana Huidobro culpa a los medios de cumunciación de condenar "con saña" a su hijo antes de escuchar las versiones de los testigos y la suya propia, y también de haberle condenado a ella y a su familia a "vivir escondidos" por miedo "a un ataque de nazis".

En este sentido, la madre de Rodrigo Lanza asegura que han recibido infinidad de amenazas en redes sociales. "Ahora no puedo salir a la calle por el miedo a ser reconocida y atacada", asegura tras haberse hecho pública su dirección postal, así como imágenes de la familia.

"Ahora tememos por nuestras vidas porque yo sé que a Rodrigo lo atacaron con una navaja y sé que estas personas que nos amenazan son peligrosas", añade.

La madre de Lanza asegura que dentro de la situación "tan difícil", ella lo encontró "bien". Lo vio esposado y tras un cristal, proque se encuentra en prisión preventiva y en régimen de aislamiento, otro aspecto que critica su madre y que lo achaca al "juicio mediático" y a la "alarma social". "Organismos internacionales plantean el asislamiento solo como sanción y por un máximo de 14 días, porque puede generar trastornos psicológicos irreversibles. A Rodrigo lo queieren mantener allí un mínimo de seis meses".