Los conductores de vehículos conectados reciben alertas de dos situaciones de peligro en la vía: la presencia de un ciclista o un vehículo parado en la carretera.
Identifica al conductor y al pasajero del vehículo a través de sus voces.
Ambos puedan enviar comandos de voz al servicio Alexa.
Algunas opciones que permite son ajustar la posición de los asientos, iniciar el sistema de masaje y cambiar la configuración de la climatización con la voz.