Gareth Bale protagonizó varios gestos feos durante el partido Levante UD - Real Madrid (1-2). El más notorio fue apartar a Lucas Vázquez cuando trató de abrazarle tras marcar el 1-2, pero no el único.

Según han aportado las imágenes del canal Vamos! (Movistar+) y el programa 'El golazo de Gol' (Gol), Bale dejó de calentar por decisión propia cuando vio que su entrenador, Santiago Solari, decidió dar entrada a Fede Valverde para sustituir a Toni Kroos.

Bale se sentó entonces en el banquillo, para sorpresa de los allí presentes. Marcelo le dijo que se quitara el peto de calentamiento, pero Bale no le hizo caso y permaneció allí sentado, con las piernas cruzadas y bebiendo agua.

El preparador físico, Antonio Pintus, le dice que vuelva a calentar, y Bale se niega. En ese momento, Solari le llama para saltar al campo, y ahí sí obedece. Entra después de cinco minutos sin calentar en lugar de Benzema.