La salida de Cristiano Ronaldo supuso un verdadero terremoto entre la afición del Real Madrid. El crack luso había sido el jugador más decisivo del equipo blanco durante las últimas nueve temporadas, así que parecía evidente que el club iba a hacer un esfuerzo para reforzar el ataque. Sin embargo, la única incorporación en la vanguardia ha sido la de Vinicius Junior, mientras que el fichaje estrella ha sido el de Thibaut Courtois, que no ha debutado con el equipo blanco y sería muy sorprendente que fuese de la partida en Tallin.

En cualquier caso, Keylor Navas ha dejado buenas sensaciones bajo palos, y como ya aseguró Julen Lopetegui al término del Trofeo Santiago Bernabéu, tener al costarricense y al belga es una "gran solución, no un problema". La zaga blanca también se ha mostrado bastante sólida, si bien es cierto que Varane y Marcelo han tenido menos rodaje que sus compañeros y que Odriozola, que ha dejado buen sabor de boca, no estará disponible por lesión. Veremos cómo responde la zaga blanca ante el potencial ofensivo del Atlético de Madrid.

En medio campo también hay algunas dudas. Casemiro fue de la partida frente al Milan, pero se le vio falto de ritmo y sin embargo, el medio campo compuesto por Kroos, Isco y Dani Ceballos, rindió de maravilla frente a la Roma. Es una composición menos equilibrada en defensa -de hecho Casemiro suele funcionar bien contra el Atlético de Madrid-, pero hasta el momento es la que ha dado más fluidez al equipo blanco y sobre todo, la que se ha mostrado en mejor forma en este momento de la temporada.

En ataque, la figura de Gareth Bale ha salido totalmente revalorizada tras esta pretemporada. Tras la salida de Cristiano Ronaldo, el galés debe dar un paso al frente, y hasta el momento se ha mostrado muy productivo en ataque. Cabe esperar que comparta delantera con Benzema -que ha marcado dos tantos en los últimos dos partidos del equipo- y con Asensio, que en estas fases de la pretemporada ha rendido a gran nivel, dejando claro que es un jugador que pronto "coge la forma".