Max Verstappen evitó que el relato de superación de Lewis Hamilton llegase a su conclusión deseada, y en Mercedes no se lo están tomando nada bien. La remontada en el final de la temporada que llevó al heptacampeón a empatar a puntos para la cita definitiva de Abu Dhabi se quedó cortada por la victoria del neerlandés en la última vuelta, no sin polémica.

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Tan mal se lo ha tomado la escuadra anglogermana que ni siquiera enlazar su octavo campeonato del mundo de constructores les ha calmado. Aunque ese mismo día sí lo celebraron (y a lo grande), conforme pasan los días no se acaban de quitar el escozor de la derrota de su piloto. Tras combatir duramente contra Red Bull durante toda la temporada ahora han enfocado sus iras hacia la FIA y hacia Michael Masi.

El domingo ya intentaron reclamar en los despachos que anularan esa épica última vuelta, algo que la FIA les rechazó. Desde entonces están estudiando qué hacer con el asesoramiento de abogados de primer nivel, encabezados por Paul Harris. Este letrado tiene entre sus éxitos haber logrado que el Manchester City se librase de la expulsión de la Champions League que le había puesto la UEFA por incumplir el 'fair play' financiero.

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Mercedes, de hecho, ya contaba con que no iba a ser una carrera sin polémica porque Harris estuvo presente en Abu Dhabi. Fue él quien lideró la reclamación inicial que la FIA les rechazó y ahora es quien está estudiando qué hacer ahora. De momento, y aunque los rumores apuntan a que se ha enfriado el enfado, el siguiente paso que deben hacer es presentar la reclamación en el Tribunal Internacional de Apelación de la FIA, en París. Si aún así reciben el 'no', podrán aún ir al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), en el que Harris ya tiene experiencia con el citado caso del City.

"Nosotros llevamos los mejores ingenieros; ellos, al abogado"

Desde Red Bull se han mostrado muy críticos con lo que consideran una falta absoluta de deportividad por parte de Mercedes. "Entendemos la frustración. Pero si pierdes, tienes que aceptarlo", reclamó Helmut Marko, asesor de Red Bull y, a efectos prácticos, uno de los hombres fuertes de la estructura.

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En concreto, apuntó precisamente a la presencia de Harris en Abu Dhabi. "Nosotros llevamos a los mejores ingenieros, a los mejor pagados del mundo, a la carrera para sacarle el máximo partido al coche; ellos, al abogado. No podemos entender cómo se comportaron después de la carrera", señaló el austriaco.

Veto protocolario

Mientras se resuelve la situación, silencio absoluto. Tanto es así que han cerrado todos los canales de comunicación: Hamilton ya no estuvo en la rueda de prensa posterior a la carrera de Yas Marina, y los responsables del equipo, incluido el propio Toto Wolff que suele ser muy proclive a comparecer ante los medios, no han soltado ni una declaración pública desde el domingo.

El veto a las comparecencias públicas es tal que han decidido impedir el acto protocolario para festejar que son campeones del mundo de constructores. Mercedes se ha negado a participar en la sesión de fotos oficial de la FIA y tampoco han enviado uno de sus coches que han logrado el título de marcas de Fórmula 1 ni de Fórmula E, que ganaron en agosto. La foto oficial cuenta con las dos notables ausencias.