Salgado dijo que espera poder reunirse la próxima semana con la Federación Española de Municipios y Provincias, después de los macrobotellones convocados para el próximo viernes en distintas ciudades.

"A la vista de lo sucedido, el objetivo es ver si desde Sanidad puede ayudar a que estos hechos con presencia de adolescentes no se repitan", explicó la ministra.

La ministra, que eludió referirse a alguna medida en concreto para frenar este consumo abusivo del alcohol, sí aludió a que la preocupación de su Departamento por estos consumos viene de tiempo atrás.

Recordó que la ley prohíbe vender o suministrar alcohol a los menores de los 18 años y dijo que quería llamar la atención sobre el hecho de que el nivel de percepción respecto a los daños del alcohol en la salud es menor en estas edades, y que son más graves los efectos sobre su desarrollo cerebral.

Problema de orden público

Las convocatorias de estos macrobotellones se están viendo como un problema de orden público "y es posible que lo sea, pero desde Sanidad la preocupación son los efectos sobre la salud y la solución está en la educación".

Mientras no llegue esta solución educativa, dijo la ministra, Sanidad quiere reiterar su apoyo a las autoridades autonómicas y locales que tratan de impedir lo que debe impedirse, y es que los adolescentes beban.

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