La Audiencia Nacional ha absuelto al concejal de Madrid Guillermo Zapata del delito de humillación a las víctimas del terrorismo por el que fue juzgado el pasado 7 de noviembre. No aprecia pretensión de ofender a las víctimas del terrorismo en el tuit que escribió en 2011 y en el que citó a Irene Villa; por tanto, dicho mensaje no es perseguible penalmente, sentencia.

La Sección Tercera de la Sala de lo Penal entiende que ese comentario y otros dos escritos por el edil —fuera del proceso, pero que son citados como contexto en la sentencia— son "desafortunados" y "seguramente sean reprobables en otro plano distinto al de la legalidad penal". Así, no cabe ni plantear, como pedía la acusación, si existe un conflicto entre el derecho a la libertad de expresión y el de la dignidad de las víctimas, explica.

Zapata escribió en enero de 2011 con su cuenta @casiopeaexpres: "Han tenido que cerrar el cementerio de las niñas de Alcasser para que no vaya Irene Villa a por repuestos". Ese mismo día lanzó otro tuit sobre el Holocausto y, año y medio después, otro en el que aludía a Marta del Castillo.

La Sala ya incluye en el apartado de "hechos probados" de la sentencia, justo antes de argumentar su fallo, que todos esos mensajes se difundieron "en el curso de conversaciones sobre debates a modo de chistes macabros". Para la Audiencia, Zapata escribió mensajes aislados, sin una continuidad en las expresiones que pudieran calificarse de humillantes y, además, mezcló a diferentes tipos de víctimas; descarta un "ánimo injurioso o maltratador".

La sentencia describe los dos primeros tuits como una "derivación de humor macabro que se sustenta sobre toda clase de ofendidos por hechos delictivos"; y el tercero lo enmarca "en clave de una crítica sobre un debate de actualidad política", ya que se refería al presidente Mariano Rajoy.

Según la Sala, la redacción del artículo 578 del Código Penal habla de "realización de actos que entrañen descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas de los delitos terroristas o de sus familiares", y no aprecia que esos "actos", en plural, se hayan llevado a cabo. Por ello, tampoco ve pertinente el reproche de la acusación a Zapata por el hecho de que no diera explicaciones inmediatas tras escribir los mensajes. De haber continuidad en las expresiones humillantes, dice la Sala, esas explicaciones habrían sido del todo "irrelevantes".

El fallo, en cambio, sí da por buenas las explicaciones ofrecidas por Zapata en el juicio. "Posibilitan una corroboración" de la argumentación del propio tribunal, asevera, aunque aclara que no se puede probar que el tuit sobre Irene Villa, tal y como el concejal justificó desde el banquillo, fuera la mera cita de un chiste "popular de su barrio". Aunque este, al igual que el tuit sobre el Holocausto, "se ubique entre comillas", apostilla.

La Asociación Dignidad y Justicia solicitaba para Guillermo Zapata un año y ocho meses de prisión. Fue la única acusación que llevó a juicio a Zapata  después de que la Fiscalía retirara la suya. El Ministerio Público, de hecho, pidió la libre absolución del acusado el pasado 7 de noviembre. La sentencia hecha pública este martes por la Audiencia Nacional, en la que se declaran las costas de oficio, admite recurso.

Este caso llegó a juicio después de que el juez instructor de esta causa, Santiago Pedraz, la archivara en tres ocasiones. Consideró, en la misma línea, que no había delito porque la afectada por el tuit no se sintió ofendida y entendía que con ese comentario no pretendió humillar a las víctimas del terrorismo, "por mucho que una mayoría crea que unas palabras sean humillantes".

Zapata ha celebrado su absolución y ha agradecido el apoyo en todo estos meses al equipo de Gobierno de Manuela Carmena, con quien ha hablado al respecto en los pasillos del Ayuntamiento.

Zapata ha hecho estas declaraciones en una breve comparecencia ante los periodistas convocada por el grupo municipal de Ahora Madrid en el edificio municipal de Plaza de la Villa, en la que ha estado acompañado por la portavoz municipal, Rita Maestre, además de los concejales Pablo Soto (Participación Ciudadana) y Carlos Sánchez Mato (Economía y Hacienda).

El edil se ha reafirmado en su decisión de dimitir como delegado de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid dos días después de ser nombrado, en junio de 2015, tras mantener una conversación con la alcaldesa una vez que se conocieron los tuits que había publicado años antes y por los que ahora ha sido juzgado y absuelto.

"Lo que estamos hablando hoy aquí tiene que ver con una resolución jurídica y no con una decisión política de la que yo estoy orgulloso; yo creo que había que dimitir", ha respondido Zapata cuando los periodistas le han preguntado por esta cuestión.

Tras poner en valor el trabajo de su sucesora Celia Mayer al frente del área, Zapata ha comentado que dimitir le permitía mostrar qué tipo de persona es y qué piensa de las cosas, además de que el trabajo en Cultura y Deportes no fuese cuestionado por quién dirigía el departamento.

El actual concejal presidente de los distritos de Villaverde y Fuencarral-El Pardo ha comentado además que ha visto a Manuela Carmena "por un pasillo", ya que no se han podido localizar por teléfono antes, y se han dado un "abrazo" y "compartido unas palabras".

También ha tenido unas palabras para las asociaciones de víctimas del terrorismo, con quienes a raíz de su imputación ha tenido una relación "más cercana y directa", y ha recordado "su respeto profundísimo a la autonomía e independencia de los jueces".