Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Civil de Castellón han desarticulado una banda asentada en Peñíscola y Benicarló (Castellón) que cometió al menos 27 robos por toda España, según han informado ambos cuerpos este martes. La operación ha conllevado la detención de 15 personas, cifra que todavía podría aumentar.

A mediados de julio, los Mossos detectaron un aumento de robos en la provincia de Lleida que seguían un mismo patrón: eran robos en casas aisladas o unifamiliares situadas en las afueras de pueblos pequeños como Tornabous, Bellcaire d'Urgell, Vallfogona de Balaguer o Arbeca. Los ladrones actuaban de día y buscaban joyas y dinero.

Las pesquisas condujeron a la policía hasta una familia establecida, principalmente, en Peñíscola y Benicarló, motivo por el que el Juzgado de Instrucción número 2 de Balaguer pidió la colaboración de la Guardia Civil. Los investigadores descubrieron que los presuntos ladrones no sólo se habían desplazado a la provincia de Lleida para robar, sino que se movían por toda la geografía española en coches a nombre de terceros para no ser identificados.

En total, se les atribuyen 27 robos con fuerza en interior de vivienda en una decena de poblaciones leridanas y tarraconenses, así como en localidades de las provincias de Castellón, Granada, Teruel, Jaén, Almería, Huesca, Zaragoza, Málaga, Sevilla y Jaén. La policía, sin embargo, no descarta que en los próximos días puedan atribuírseles más asaltos.

Con toda la información recabada, los días 9 y 10 de febrero, la policía realizó una decena de entradas y registros en siete pisos de Peñíscola, Benicarló, Castellón y Benicasim, dos establecimientos de alquiler de vehículos y un establecimiento comercial de Reus (Tarragona). Los agentes encontraron una gran cantidad de joyas, objetos de coleccionista, relojes y objetos electrónicos presuntamente procedentes de los robos.

En los registros en Peñíscola se encontraron dos plantaciones de marihuana con más de 200 plantas y 25 gallos de pelea, que han sido decomisados por la Unidad de Medio Ambiente de la Guardia Civil. Asimismo, se encontraron tres escopetas de varios calibres y armas blancas. Por eso, además de los 27 delitos de con fuerza interior de vivienda y pertenencia a banda criminal, los detenidos están acusados de usurpación del estado civil, desobediencia y atentado contra la autoridad, falsedad documental, receptación y tráfico de drogas.