El Tribunal Constitucional (TC) podría admitir a trámite este martes la impugnación del proceso participativo del 9 de noviembre por parte del Gobierno, lo que automáticamente conllevaría su suspensión cautelar como ocurrió con la consulta original. De ser así, ¿habrá urnas el próximo domingo? ¿Qué hará el Govern? ¿Serán los voluntarios quienes tomen el relevo en la organización? ¿Qué harán la Assamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural?

¿Admitirá a trámite el recurso?

La ANC lo da por hecho aunque el Govern ha presentado una demanda para que no admitala impugnación alegando que el proceso participativo no es una continuidad de la consulta original, sino una cosa distinta. También alega que el Gobierno debería haber instado un incidente de ejecución en lugar de presentar un nuevo recurso. Para el catedrático de derecho constitucional de la Universidad de Barcelona Xavier Arbós, es difícil establecer el límite entre la movilización popular y las actuaicones institucionales, indica en una conversación con 20minutos.es

La Generalitat alegaba hasta ahora que no había ninguna orden ni decreto.

Arbós señala que ese no es un argumento válido pues existe jurisprudencia, como recoge el dictamen del Consejo de Estado, sobre la suspensión de disposiciones que no han sido publicadas sino dadas verbalmente. Sin embargo, detalla que el Alto Tribunal "solo puede suspender aquello que se impugna", aunque avisa que "tiene una gran discreción, un gran margen para tomar disposiciones" y no hay un órgano superior al que recurrir.

De ser suspendido, ¿sería ilegal participar en la votación?

El magistrado de la Audiencia de Barcelona Santiago Vidal cree que no porque la admisión de la impugnación implicaría la suspensión de los actos de la Generalitat, por lo que tendría que "abstenerse de hacer nada", incluido prohibirla. En su opinión, si el TC prohibiera que los funcionarios voluntarios participaran, "estaría cometiendo un delito de prevaricación", porque adoptaría una decisión que carece de cobertura legal. La colaboración voluntaria de funcionarios y ciudadanos no tendría ninguna consecuencia desde el punto de vista jurídico.

Arbós comparte la misma opinión y recuerda que debería respetarse la libertad de expresión. De hecho, considera que el debate soberanista no debería resolverse por la vía judicial y califica de error la eventual suspensión.

¿Qué hará el Ejecutivo de Artur Mas?

Por ahora el Govern se mantiene a la expectativa de lo que decida el TC, aunque recuerda que el Alto Tribunal no se pronunciará sobre el fondo de la cuestión. De momento, sigue con la intención de celebrar el 9-N y recuerda que los preparativos ya están listos y que se basa en el voluntariado. Sin embargo, la vicepresidenta, Joana Ortega, admitió el domingo que no se puede garantizar "al cien por cien" que el domingo haya urnas.

¿Se requisarán las urnas, se cerrará la web del proceso...?

Desde la Consejería de Gobernación y Relaciones Institucionales, responsable de los preparativos, no quieren adelantar hipótesis pero recuerdan que tras la suspensión de la consulta original, la web siguió activa, por lo que creen que participa2014.cat no cerrará. Dependía de Presidencia y el consejero Francesc Homs asumió públicamente la responsabilidad.

Sin embargo, el catedrático de la UB cree que que el TC sí podría cerrar la web, suspender la campaña informativa o la cesión gratuita de espacios publicitarios, o prohibir la apertura de los puntos de votación de la Generalitat "pero no podría prohibir que la votación se hiciera en la calle. Se excediría en sus limitaciones", agrega Arbós. Tampoco podría prohibir el registro de participantes, pues es voluntario.

La ANC y Òmnium, ¿qué harán?

La junta de la ANC, una de las entidades impulsoras de la campaña Ara és l'hora (Ahora es la hora), se reunirá el martes por la tarde y está a la expectativa de conocer las decisiones del Constitucional y la reacción del Govern, pues considera que es el Ejecutivo catalán el que debe liderar el proceso.

¿Mantendrán los actos programados?

Sí, aunque no saben si para animar al voto o a manifestarse. El miércoles celebrarán un maratón telefónico para animar a los catalanes a participar en el 9-N y para el viernes preparan el acto final de la campaña Ara és l'hora, en el que están invitados a participar todos los partidos proconsulta. Tendrá lugar en la avenida Maria Cristina de Barcelona y empezará a las 20 horas.

Y el domingo, ¿qué?

La ANC asegura que el domingo saldrán a la calle, ya sea para votar en el proceso participativo o para reivindicar su derecho a decidir. Si el TC suspende el proceso participativo, la Assamblea anima a los catalanes a concentrarse a las 9.00 horas ante los colegios con las papeletas.