España ha autorizado este miércoles el uso de sus bases aéreas a los aviones franceses que participan en el intervención en Mali en caso de necesidad, después de permitir el martes el sobrevuelo del espacio aéro por parte de las aeronaves de camino al país africano, según ha informado el Ministerio de Defensa.

La decisión de permitir el uso de las bases militares, una medida habitual entre países aliados, según el Ministerio, se ha tomado durante el transcurso de una conversación telefónica entre el ministro de Defensa, Pedro Morenés, y su homólogo frances, Jean-Yves Le Drian. Durante esa charla, el ministro galo ha pedido también a España la aportación de un avión de transporte.

A este respecto, España ofrecerá durante la reunión extraordinaria de ministros de Exteriores de la Unión Europea sobre Mali, que se celebrará el jueves en Bruselas, un avión de transporte. Será, probablemente, un Hércules, que se desplegaría integrado en la misión europea de formación EUTM Mali. No obstante, la aeronave no se incorporará a la operación francesa, sino que irá integrado en la misión de la UE y tendría encomendado el traslado de tropas de los países de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO), integrada por cerca de 3.500 efectivos.

Del acuerdo que salga de la reunión de Bruselas dependerá la fecha de despliegue y el número de militares, así como el lugar de instalación de la base de operaciones. Todo ello a pesar de que este tipo de decisiones requieren la aprobación del Gobierno y del Parlamento. Un requerimiento que, no obstante, puede sortearse sin dificultad, ya que la ley permite poner en marcha una misión y, después, recabar la autorización parlamentaria.